La Región de Valparaíso ha vivido una verdadera tragedia en distintos puntos de la zona. El fuego devastó miles de hectáreas, viviendas y hasta la fecha, lamentablemente, se ha confirmado la muerte de 123 personas, según el Servicio Médico Legal.
Una de las zonas más afectadas fue el Jardín Botánico de Viña del Mar, que ha sido consumido por las llamas en prácticamente su totalidad. El pulmón verde de la ciudad jardín había sufrido anteriormente incendios grandes, como en el caso del año 2003, donde se perdieron 250 hectáreas, pero nunca con la voracidad del reciente, que ha dejado, además, cuatro fallecidos en su interior.
Juan Carlos Bodoque, periodista de 31 minutos, hace más de 20 años realizó una nota verde con el propósito de concientizar sobre los efectos de los incendios forestales y lo fácil que es provocarlos, situado en la mencionada catástrofe que sufrió el Jardín Botánico en esa época.
En la cuenta de Instagram de 31 minutos, publicaron un fragmento de la nota verde, a raíz de los incendios que afectan a la Quinta Región y al Jardín Botánico, acompañado del siguiente texto: “Fue testigo de un incendio en el Jardín Botánico de Viña del Mar, que anticipó la tragedia que hoy lamenta Chile entero”.
Además, agregaron: “Qué poco aprendemos de nuestra experiencia. Es urgente educar y concientizar para prevenir y valorar, un abrazo enorme y todo el apoyo para la gente que hoy sufre tanto, especialmente las niñas y niños de Viña del Mar, ciudad que nos ha dado infinitas alegrías”.
La Nota Verde en el Jardín Botánico (2003)
Bodoque en la nota entrevistó a Huachimingo, un habitante de la zona que lamentablemente quedó sin hogar producto de los incendios en el Jardín Botánico allá en el año 2003. “Todos, todos los incendios forestales que hay en Chile son provocados por la negligencia, descuido o maldad del hombre”, sostuvo Huachimingo.
Ante el paisaje desolador que muestran las imágenes, el animal autóctono de la zona agregó: “Pero lo peor es que muchos se producen por el puro placer de causar daño a la naturaleza”.
El periodista realizó una sentida reflexión sobre las consecuencias de los incendios forestales y los autores de los mismos: “Si esos irresponsables supieran que los daños de un incendio forestal son irreparables, quizás habrían tenido más cuidado. Muchos animales mueren, otros quedan sin casa y la vegetación se convierte en cenizas”. Por último, el conejo rojo agregó: “El suelo queda absolutamente inservible y deberán pasar muchos años para que vuelva a crecer algo”.