El “Síndrome de Burnout Parental” es una condición que ha afectado a los padres y madres durante la pandemia. Colapso, falta de atención y sentimiento de andar en “piloto automático” son parte de los síntomas que han afectado el papel de la crianza durante el confinamiento.
La investigación, recientemente publicada en la revista Terapia Psicológica, evidencia que este síndrome tuvo un considerable aumento durante el inicio de la pandemia del Covid-19.
Esta indagación fue realizada por María Pía Santelices, de la Escuela de Psicología de la Universidad Católica; Silvia Narváez, del Centro de Investigación del Abuso y la Adversidad Temprana UC; María Josefina Escobar, de la Escuela de Psicología de la Universidad Adolfo Ibáñez, Daniela Oyarce, de la Universidad Católica de Lovaina (Bélgica); y Hedwig van Bakel, de la Universidad de Tilburg, en Países Bajos.
“Ya teníamos un estudio sobre el Burnout Parental previo a la pandemia, y cuando parte el confinamiento, y lo que significó el nivel de demanda de las familias, quisimos ver cómo se comportaba este síndrome”, explicó Josefina Escobar.
El Burnout Parental se produce por un desequilibrio entre el nivel de demanda que tienen los padres, madres y cuidadores; y los recursos que tienen en torno a la crianza de sus hijos o hijas.
Ante esto, Escobar agrega que “todas las familias, de una manera u otra, se habían visto desprovista de recursos para la crianza, como el espacio protegido para el trabajo, contar con los colegios y jardines infantiles, o también contar con abuelos u otros cercanos para el cuidado de los niños”.
Según el estudio, la niveles más altos de burnout parental están en las madres, quienes reportaron mayor impacto negativo de la crisis por Covid-19, usando más estrategias de supresión y menos de reevaluación.
¿Cómo identificar el “Síndrome de Burnout Parental” ?
De acuerdo a Josefina Escobar, uno de los síntomas es el agotamiento excesivo a nivel físico, emotivo, cognitivo; “un distanciamiento emocional con los niños. Subjetivamente la percepción de los padres y madres que sufren este síndrome es que sienten que ‘funcionan en piloto automático’. Hacen todo lo que tienen que hacer, en temas de tareas domésticas y de cuidado, sin estar realmente presente”.
“Sabemos que la crianza tiene situaciones de estrés, pero también tiene sucesos gratificantes que nos hace que funcionemos con cierto equilibrio en términos de salud mental. Cuando estamos frente a papás agotados, son personas que no logran disfrutar esos momentos que antes sí apreciaban. Todo se vuelve un agobio para ellos”, detalló Escobar.