Un grupo de médicos del Departamento de Salud de la Universidad de California (Estados Unidos) desarrolló un implante cerebral que ayuda a tratar casos de depresión severa, el cual reestablece los patrones cerebrales, algo así como un “marcapasos para el cerebro”.
La investigación publicada en Nature Medicine, mostró “un éxito histórico en el esfuerzo de años para aplicar los avances en neurociencia al tratamiento de trastornos psiquiátricos”.
“Señala el camino hacia un nuevo paradigma que se necesita desesperadamente en psiquiatría”, señaló en un comunicado Andrew Krystal, profesor de psiquiatría, miembro del Instituto Weill de Neurociencias de UCSF y uno de los creadores.
El experto destaca que se trata de “medicina de precisión”, siendo la depresión un campo que aún tiene desafíos, ya que esta puede involucrar diferentes áreas del cerebro según el caso.
“La idea de que podemos tratar los síntomas en el momento, a medida que surgen, es una forma completamente nueva de abordar los casos de depresión más difíciles de tratar”, manifestó Katherine Scangos, una de las primeras autoras en esta área del Instituto Weill.
Según lo informado por la Universidad de California, el método aún está lejos de ser aprobado por la FDA, pero está bien encaminado para resolver enfermedades como la depresión severa.