Para muchos países, los niños menores de 12 años se han vuelto el centro de atención por la pandemia debido a que para ellos no hay vacunas aprobadas para enfrentar el Covid-19.
El retorno a clases presenciales sigue generando divisiones, y aunque los gobiernos han optado por mantener abiertos los colegios -debido a diversos estudios que aseguran que la pérdida de clases es peor- los brotes en colegios siguen preocupando.
Si bien se sabe que los niños menores no se enferman de forma grave (la tasa de letalidad es menor al 1%), son las secuelas del virus que mantienen en alerta a la comunidad médica, como lo es el Síndrome Inflamatorio Multisistémico (PIMS), el cual puede dañar el corazón, sistema digestivo, nervioso y respiratorio.
“Lo que veo en los niños con covid me asusta. Algunos de mis pacientes han requerido cuidados intensivos y, en las últimas semanas, he visto muertes pediátricas”, comentó en BBC Mundo Christina Propst, pediatra del Texas Medical Center (Estados Unidos).
“Esas muertes son devastadoras, especialmente cuando ves el sufrimiento por el que debe pasar un niño intubado durante un largo período de tiempo (…) El problema es que la delta está afectando a más niños que otras variantes. De hecho, en el Texas Children’s Hospital un tercio de los niños ingresados por covid requiere cuidados intensivos”, agregó.
“Es realmente desgarrador ver niños intubados por covid. No habría dicho esto hace un año cuando teníamos la variante Alfa, pero aquello no fue nada en comparación con lo que estamos viviendo ahora”, sostuvo Propst ante la expansión de la variante Delta en ese país, que ha generado un gran aumento de contagios.
Las principales dificultades con la variante Delta son su alta transmisibilidad, el hecho de que los menores de 12 años no están vacunados y que muchos adultos ya no están cuidándose.
“Me gustaría que más personas pudieran ver lo que los pediatras que trabajan en la primera línea están viendo en este momento. Es simplemente trágico, atroz, devastador. Siento una combinación de dolor extremo, ira y frustración, porque la muerte de un niño por covid es completamente evitable”.
“Si tienes un hijo mayor de 12 años, debes vacunarlo. Es como cuando le exiges que se ponga el cinturón de seguridad en el auto para que su vida no corra peligro. He visto a padres que han perdido a sus hijos y que le ruegan a la gente que se vacune para evitarles a otras familias el dolor que están sintiendo”, agregó la funcionaria de salud.