Más allá de El Niño o La Niña: Masa de agua cálida en el Océano Pacífico está contribuyendo a la megasequía en Chile
Los científicos esperan que esta masa se enfríe, ya que se trataría de un fenómeno periódico que dura varias décadas (de entre 20 a 40 años como sucede ahora), ya que inició en 1979, aunque no traería de vuelta el mismo clima.
La megasequía que está afectando a Chile en la última década se ha visto potenciada por una gran masa de agua cálida ubicada en el Océano Pacífico, específicamente al este de Nueva Zelanda.
Se trata de la llamada “Mancha del Sur”, la cual ha estado presente en otras ocasiones y que sería un factor clave en la influencia sobre el clima chileno, según reveló la investigación del Centro de Ciencia del Clima y la Resiliencia (CR)2, la cual fue publicada en la revista Journal of Climate.
“Más o menos desde 2017 nos empezamos a dar cuenta de que la razón de que el anticiclón del Pacífico estuviese tan fuerte y no llegaran los frentes de lluvia a la zona central obedecía a un factor que iba más allá de El Niño o La Niña”, explicó el climatólogo René Garreaud, líder de un equipo del (CR)2, a lo que agregó que ya habían iniciado una investigación en 2019, pero que “ahora estamos mucho más seguros”.
Esta mancha tiene un tamaño similar al territorio continental de Estados Unidos y está 1,5 grados más cálida que hace 40 años, a pesar de que zonas cercanas solo han variado su temperatura en 0,2 y 1 grados.
Que sea una masa de agua cálida, significa que el aire sobre ella se calienta y debido al viento se traslada a Chile, lo que influye en las tendencias de presión y genera menos precipitaciones.
“La mancha cálida juega un clarísimo rol en este sostenido aumento de temperatura, en la intensificación del anticiclón y la disminución de precipitaciones en Chile central”, explicó el investigador, aunque además agregó que se ve potenciado por el cambio climático, por lo que “probablemente está influyendo en la intensidad de este calentamiento y en una persistencia tan larga”.
Los científicos esperan que esta masa se enfríe, ya que se trataría de un fenómeno periódico (que dura varias décadas), de entre 20 a 40 años como sucede ahora, ya que inició en 1979.
Aún así, recalcó que “no vamos a llegar a una mancha fría porque el cambio climático ya metió su cola. Si bien vamos a tener cierta mejoría, no volveremos a los años extremadamente lluviosos del pasado”.