Hace más de un año, una manada de elefantes inició un recorrido por el suroeste urbano de China, el que al parecer empieza a llegar a su fin, ya que lentamente empiezan a regresar a su hábitat.
El grupo de animales fascinó a la prensa y a la población cuando salieron de la reserva natural donde vivían en la Prefectura Autónoma de Xishuangbanna Dai, un lugar junto a la frontera con Myanmar y Laos.
En este viaje allanaron granjas e incluso una residencia de ancianos en busca de comida, recorriendo más de 500 kilómetros hacia el norte.
Ante esto se desplegaron camiones, trabajadores y drones para seguirlos, además se utilizó comida para alejarlos de zonas pobladas y evacuaron carreteras para que viajaran seguros.
Este domingo por la noche se guió a los 14 paquidermos para que cruzaran el río Yuanjiang y se les abrió una senda para regresar a su hábitat.
Si bien aún siguen estando lejos (aproximadamente a unos 200 kilómetros) la Administración Nacional de Bosques y Pastos apuntó que ya cruzado el río, los animales ya están en un “hábitat adecuado”.
Por otro lado, el gobierno provincial entregó un comunicado donde se indica que la manada ha hecho avances significativos, pero que se se seguirá trabajando para que vuelvan al lugar de donde salieron.