¿Cuál es el vínculo de las enfermedades dentales con las cardiovasculares?
El mal aliento o sangrado al lavarse los dientes pueden ser consecuencias de enfermedades periodontales, pero diversas investigaciones han demostrado la existencia de una relación entre este tipo de afecciones y enfermedades crónicas como las enfermedades cardiovasculares.
Esta serie de patologías afectan al tejido que protege y afirma los dientes en los maxilares, siendo enfermedades infecciosas e inflamatorias que se gatillan por cambios en la calidad y cantidad de las bacterias que habitan en la boca, y que progresan según la respuesta inmune del paciente.
En una primera etapa, la persona afectada desarrolla gingivitis, una inflamación superficial de la encía que se manifiesta normalmente por el sangrado al lavarse los dientes, pero que al progresar a periodontitis se transforma en una inflamación profunda de los tejidos de soporte dentario y de la encía, afectando al hueso. Es una enfermedad irreversible y que termina produciendo la pérdida de los dientes al destruir el hueso en el que se encuentra alojado.
Al respecto, la profesora Patricia Hernández, de la Facultad de Odontología, explicó que se teoriza que “las bacterias asociadas a la periodontitis, o parte de ellas, pueden pasar a la sangre, viajar para alojarse en órganos distantes (como vasos sanguíneos) y producir una respuesta inflamatoria, favoreciendo la aterogénesis (formación de placas fibra y grasa), el principal mecanismo causante de las enfermedades cardiovasculares”.
Tratamiento y reducción de casos
Precisamente, su investigación ha buscado analizar la presencia de esta proteína, particularmente en mujeres chilenas que sufren de periodontitis. Esta arista permitiría contar “con un marcador inflamatorio que podría tomarse de manera no invasiva a través de un fluido proveniente de la encía, y que en el futuro podría servir como un eventual coadyuvante en la detección de riesgo cardiovascular o de inflamación general”.