Un inesperado giro tomó el caso del actor y comediante Bill Cosby, ya que la Corte Suprema de Pensilvania (Estados Unidos) anuló la condena por abuso sexual que se logró gracias a la denuncia de Andrea Constand, quien fuera una de sus empleadas.
El norteamericano pasó tres años en prisión por drogar y abusar de la víctima, y fue la primera celebridad en ser declarada culpable en la era del movimiento #MeToo.
¿Por qué quedó libre?
La Corte Suprema encontró que Cosby no fue enjuiciado de forma correcta ya que un fiscal le había prometido al comediante que no se le presentarían cargos penales por las acusaciones de Constand, por lo que confió en esa promesa y testificó sin incriminarse.
Aún así, el comediante fue acusado más tarde por otro fiscal que decía no estar bajo el mandato del acuerdo anterior, razón por la que fue a prisión.
Ahora, la Corte Suprema sostiene que este fiscal sí debía atenerse al acuerdo, por lo que la condena no se podía mantener, “negar al acusado el beneficio de esa decisión es una afrenta a la justicia fundamental, particularmente cuando resulta en una acusación penal que fue predeterminada por más de una década”, sostuvieron los jueces.
¿Es un caso extraño?
En Associated Press, Wesley Oliver, profesor de derecho de Pensilvania que ha seguido de cerca el caso de Cosby, sostiene que esto no se había escuchado en una corte superior en Pensilvania o en ningún otro lado, por lo que “abre un nuevo terreno completamente” y “fija un precedente no solo para Pensilvania sino probablemente para otros estados”.
Por otro lado, es improbable que Cosby de 84 años sea enjuiciado nuevamente por la denuncia de Constand y probablemente tampoco sucedería por otras acusaciones que se llevaron a cabo en 2018.
Con información de AP.