La disminución en la contaminación acústica provocada por la pandemia ha influido positivamente en la calidad del canto de las aves, según quedó demostrado en un estudio publicado en la revista Science.
Un equipo científico investigó el impacto de la reducción del ruido en el trino de las aves, especialmente en los gorriones de corona blanca en la bahía de San Francisco, California.
“Durante la cuarentena del covid había mucho menos ruido de humanos que lo normal. Como resultado, los pájaros machos cantaron canciones de mejor calidad, y las canciones viajaron más lejos que antes del encierro”, comentó David Luther, biólogo de la George Mason University y coautor de la publicación en El Mercurio.
El canto de las aves está relacionado a su selección sexual, reproducción y defensa de territorios.
Los resultados indican que algunos animales cambian su comportamiento como respuesta a algo provocado por los humanos (como el ruido, por ejemplo) y vuelven rápidamente a su comportamiento normal una vez que esa presión se deja de ejercer.
Por lo tanto, los expertos señalan que si se redujera la contaminación acústica, una gran variedad de aves podría volver a habitar en las ciudades.