Un pingüino muerto en Brasil es el primer caso documentado de un animal que ha muerto producto del consumo de “residuos de pandemia”.
El animal fue encontrado sin vida en la playa de Juquehy, al norte de Sao Paulo, el cual fue sometido a una autopsia por el Instituto Argonauta para la Conservación Costera y Marina, quienes se centran en la rehabilitación de especies marinas afectadas por los residuos lanzados al mar.
Los pingüinos de Magallanes migran todos los años desde la Patagonia argentina en busca de alimentos, pero una parte de ellos se pierde del grupo y acaban en las playas de Brasil, de donde son rescatados.
“Los animales son encontrados durante este periodo, muchas veces débiles y con falta de cuidados”, explicó la bióloga Carla Beatriz Barbosa en La Vanguardia.
Todos los que son encontrados con vida, son trasladados a rehabilitación y luego devueltos a la naturaleza, mientras que los que no sobreviven son sometidos a una necropsia.
En el caso particular de este pingüino, se le encontró una mascarilla N95 al interior del estómago, lo que elevó la preocupación entre expertos y ambientalistas sobre el manejo de desechos y la nueva amenaza que supone para las especies animales.
“Es un problema muy serio y Brasil tiene una política poco eficiente en el combate a la cuestión de la basura en el mar. Eso pasa por un problema de educación de la población, gestión, fiscalización y legislación por parte del poder público”, agregó la experta.
Hace algunos días, estudios señalaron que además el coronavirus además puede afectar a las especies marinas, lo que también sería un nuevo problema.