A raíz de la disminución de población de abejas a nivel mundial y la posible ocurrencia de este fenómeno en Chile, el bioquímico y doctor en Ciencias, Edwar Fuentes, indagó algunos de los factores que pueden explicar esta pérdida masiva de abejas, conocida como síndrome de Desorden del Colapso de Colonia.
Fuentes desarrolló el proyecto FONDECYT, que se enfocó en la detección en la miel del insecticida neonicotinoide, llamado Imidacloprid, y del parásito Nosema Ceranae, dos factores que afectarían la inmunidad social de estos insectos y que podrían explicar la disminución de las abejas.
La investigación fue implementada en la quinta y sexta región del país, y no solo registró la presencia del insecticida elaborado en base a nicotina, sino también de otro tipo de plaguicidas organofosforados, aunque en bajas cantidades.
En sí, el estudio no confirmó que estas sean las razones de las disminución ocurrida en Estados Unidos o Europa, donde la reducción de abejas es del 30 al 40%. Sin embargo advirtió que la presencia de diversos tipos de pesticidas y parásitos debe ser controlada de manera preventiva mediante políticas públicas y prácticas apícolas adecuadas para evitar las importantes pérdidas ocurridas en gran parte del planeta.
El proyecto tiene como fin también promover el valor agregado de la producción de miel chilena, el que pretende incentivar la creación de métodos para la certificación de su calidad y propiedades nutritivas y antisépticas.