El gobierno impulsa un proyecto de ley para subvencionar la educación preescolar ¿Qué te parece?

El gobierno impulsa un proyecto de ley que crea un sistema de subvenciones para los niveles medio menor y medio mayor de la Educación Parvularia (donde asisten niños de 2 a 4 años).

La iniciativa ha generado el rechazo de trabajadores de ese sector, quienes esta semana realizaron un paro de advertencia y llamaron a los parlamentarios a no aprobarlo.

Actualmente, en Chile no existe una subvención para esos niveles de la educación preescolar y el Estado entrega los recursos a los jardines infantiles de dos formas, dependiendo de quién los administra. 52% de los niños de 2 a 4 años no asiste al jardín Así, aquéllos de la Junta Nacional de Jardines Infantiles (Junji) y de Fundación Integra reciben fondos directos (basales), que se entregan a través de la Ley de Presupuesto. Los jardines Junji reciben $288.535 por niño y los de Integra $225.643. Esos recursos se entregan por párvulos matriculados, independiente de su nivel de asistencia a clases.

Otro caso distinto es el de los jardines Vía Transferencia de Fondos (VTF). Aquí se incluyen los que dependen de los municipios (que son el 90% de los VTF) y de otros sostenedores privados (10%), como el Hogar de Cristo, la Fundación de Desarrollo Campesino y Corporación Educacional El Pescador, entre otras. Estos jardines reciben recursos fiscales según la asistencia a clases. El monto es $131.116 por niño y se les entrega a través de Junji.

De aprobarse el proyecto de ley, $217 mil será la subvención base para los jardines VTF y para colegios que abran esos niveles.

Sin embargo, parte de los trabajadores de los VTF rechazan la iniciativa, pues pretenden que no se los financie a través de subvenciones por asistencia, sino a través de fondos basales, como hoy ocurre con los recintos de Junji e Integra. También advierten sobre una “escolarización” temprana de los niños, ya que ahora colegios subvencionados podrían incluir estos niveles de educación. También temen que, al permitir que se entreguen recursos fiscales a jardines privados y a colegios particulares subvencionados, se “abran las puertas a la privatización” de la educación parvularia.