Chile, junto a otros países, reconoció a Juan Guaidó como presidente encargado en Venezuela. ¿Qué te parece?
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En una álgida jornada, ayer en Venezuela el opositor Juan Guaidó se autoproclamó como presidente interino de Venezuela. Iniciativa que fue apoyada por distintos países, entre ellos, Chile.
“Hemos decidido reconocer esta presidencia de Juan Guaidó y queremos manifestarle nuestro total apoyo en su trascendente misión de poder avanzar hacia la recuperación de la democracia en un país hermano como Venezuela”, aseguró en conferencia de prensa el presidente Sebastián Piñera.
Además de Chile, los países que reconocen el mandato como encargado de Guaidó son: Estados Unidos, Brasil, Ecuador, Perú, Colombia, Costa Rica, Paraguay, Argentina, Canadá, Francia, Guatemala y Ecuador.
Por su parte, el secretario general de la OEA, Luis Almagro, aseveró que Guaidó “tiene todo nuestro reconocimiento para impulsar el retorno del país a la democracia”.
Tras los apoyos que se fueron dando, Nicolás Maduro rompió relaciones con Estados Unidos declarando en un discurso masivo, “he decidido romper relaciones diplomáticas con el gobierno imperialista de EE.UU. ¡Se van!” y dio un plazo de 72 horas para que los diplomáticos abandonen el país. Y agregó:
“Este intento de golpe de Estado, que se pretende encadenar al país, es la mayor insensatez que ha cometido el imperialismo, sus aliados y la oposición venezolana”
En Chile, el Frente Amplio rechazó la decisión tomada por Sebastián Piñera apuntando a que se debería “a colaborar en una salida a esta situación centrada en el diálogo político y no en la violencia”.
El conglomerado declaró que “la autoproclamación de Juan Guaidó es contraria al derecho internacional y a lo prescrito en la Carta Fundamental del Estado de Venezuela, no contribuyendo en ninguna medida a la salida pacífica y democrática que el pueblo venezolano se merece”.
Agregando que “acentúa más las tensiones internas, protestas y enfrentamiento entre civiles, arriesgando a la nación venezolana a un eventual golpe de Estado o peor aún, una guerra civil, con todo el lamentable costo de vidas que ello implica”.
