Duna
Sonidos de tu Mundo
1930 – Ese verano, ha viajado a Suiza para unirse a un tratamiento radical sin visitas y en esa soledad escribe estremecedoras cartas que describen a su marido la soledad de sus días, algunos oscuros, otros no. En una de ellas le dice. Un espacio de Bárbara Espejo.
1935 – . El alcoholismo, los terceros, los abandonos, la ambición de cada uno y la desmadrada vanidad los redujeron a esas ruinas hermosas que eran aún. Consciente de todo ello, a pesar de su extravío, sabiendo también que fueron endiabladamente felices mientras pudieron, Zelda le escribe a Scott desde el hospital Sheppard y Enoch Pratt, en Maryland, la siguiente carta. Un espacio de Bárbara Espejo.
1930- Zelda, la mujer de Scott Fitzgerald es finalmente internada, tras muchas crisis depresivas y nerviosas. Contra la voluntad de su médico, deja Malmaison y una vez afuera le escribe a su marido una carta dura y amarga. En la voz, Bárbara Espejo.
1920- Dos años antes, en un baile del club de campo se conoce una belleza de 17 años recién salida del instituto, Zelda Sayre, y el subteniente del ejército de Estados Unidos Francis Scott Fitzgerald. El muchacho que aspiraba a ser escritor algún día queda prendado de la niña, ella no tanto. Sin embargo, tras el primer y brutal éxito editoral de Scott Fitzgerald, “A este lado del paraíso”, Zelda se siente seducida y se casan rápidamente. Por guapos, talentosos y también por enfiestados, se convierte en la pareja célebre preferida de Nueva York en plenos felices 20. Pronto la fiesta y la bebida los pone contra sí mismos y las violentas discusiones, en casa y en público, los convierte también en los más tempestuosos. Fue justamente tras una pelea, a 6 meses de haberse casado, que Zelda le escribe esta carta. En la voz, Bárbara Espejo.
