Cartas chilenas: Ángel Parra le habla a Víctor Jara muchos años después
1987 – Desde París, Ángel, el hijo de Violeta Parra, le escribe a Víctor Jara una carta post mortem para contarle una importante noticia. En la voz, Bárbara Espejo.
Duna
/Sonidos de tu Mundo
1987 – Desde París, Ángel, el hijo de Violeta Parra, le escribe a Víctor Jara una carta post mortem para contarle una importante noticia. En la voz, Bárbara Espejo.
1965- Pablo de Rokha tras haber perdido a su mujer, Winet, y luego de que muere su hijo Carlos, decide escribirle una larga carta, que revisaremos hoy en parte. En la voz, Bárbara Espejo.
1922- Pablo Neruda conoce en el instituto pedagógico de Santiago a una estudiante de francés, Albertina Azocar, que, a pesar de mantener un romance secreto por 10 años, sería ella la musa que inspiró los “Veinte poemas de amor y una canción desesperada” que le significan el gran salto al poeta, además de la destinataria de 111 cartas que Neruda le escribió desde entonces hasta 1932. En la voz, Bárbara Espejo.
1977-Luego de haber viajado desde México a Chile para hacer la revolución tras el golpe en 1973, estuvo preso y se libró porque uno de los gendarmes había sido compañero suyo de colegio y al reconocer a Roberto Bolaño, lo dejó libre. Después de vagabundear un buen poco, el escritor, poeta, absoluto referente literario y figura elevada a calidad entre rockstar y divinidad de las letras en la actualidad, se instaló es España. Junto a su madre. Y le escribiría largas cartas a su papá. En la voz, Bárbara Espejo.
1871- En Nueva York, los estragos de la Guerra Civil finalizada en 1865 siguen mostrando sus consecuencias. Se estima que alrededor de 30 mil niños deambulan por la ciudad tras el abandono de sus padres. Los casos de infanticidio también están en aumento. Para hacer frente a la situación, la hermana Irene Fitzgibbon fundó el Foundling Asylum, una casa de acogida que daba protección a esos menores. Sólo en sus dos primeros años de operación se hizo cargo de 2.500 niños. Muchos de los padres, afligidos por su situación y la incapacidad de hacerse cargo de sus hijos, llegaban hasta las puertas del hogar ubicado en Greenwich Village y dejaban a los niños con una carta. Ése fue el caso de la Señora Cooper. En una carilla, sin usar puntos, ni comas, le pide a las religiosas que se hagan cargo de su pequeño Walter. En la voz, Bárbara Espejo.
1965- 10 años después de haberse conocido en México y de haber sido camaradas desde entonces, el Che Guevara le escribe a Fidel Castro una despedida que el cubano leería públicamente luego de que abandonara la isla. En la voz, Bárbara Espejo.
1974- El escritor inglés Brian Sibley le envía una carta a su autor de ciencia ficción favorito Ray Bradbury en la que cuestionaba las figuras animatronics que se utilizaban en Disneylandia y su sistema de sonido, aterrado, sobre todo, por la idea de que los robots llegaran algún día a dominar el mundo. La respuesta del autor de “Farenheit 451” fue increíble por su generosidad y sobre todo por su posdata, en un estilo del que sólo Bradbury es capaz. En la voz, Bárbara Espejo.
1947- Simonne de Beauvoir ha conocido en su primer viaje a Estados Unidos al novelista norteamericano Nelson Algren. Ella tiene 39, un año menos él y al principio sólo debió ser su guía en Chicago, pero a poco andar se convierte en un amor transatlántico, el hombre capaz de sacar una ternura desconocida hasta entonces para la férrea Beauvoir. En la voz, Bárbara Espejo.
1975- Entre el agua que sigue pasando agua bajo el puente de la segunda guerra mundial, hay quienes se confiesan, como Berko, uno de los 650 niños que sobrevivieron al horror de Auschwitz, y que tras salir, deambularon años por el mundo sin saber muy bien a dónde ir. Muchos años después, decide confesar uno de los grandes dolores de la época de prisionero a su mujer, en una carta. En la voz, Bárbara Espejo.
1960- En 1959 la reina recibe al presidente Eisenhower y su mujer en Balmoral, Escocia. Aunque nunca se supo de qué conversaron durante la estadía, sabríamos después que el presidente norteamericano quedó encantado con los scones que le servían a la hora del té. No sabemos si él pidió la receta o la reina, amablemente se la ofreció y la envió algunos meses más tarde. En la voz, Bárbara Espejo.