“La discusión constituyente tiene al menos, dos planos, uno que es material y concreto, y también hay una discusión más subjetiva y simbólica”.
Con estas palabras, Juan Luis Ossa dio cuenta de parte de lo que se resolverá el próximo 25 de octubre en el plebiscito.
Ossa realizó un paso histórico por la creación de las constituciones en Chile y cómo han operado. Por ejemplo comentó que en 1973 se decía que “la única que nos puede salvar de la debacle de la UP es la Constitución del 25, pero dos años después, esa constitución ya no funcionaba”. Y agregó que se habló mucho de “refundar”, algo que como dijo, “creo que no deberíamos seguir ese ejemplo “refundacional””.
Para Ossa, la constitución del 1928, que resolvió la pregunta de igualdad ante la ley en un régimen republicano, la autoridad que iba a reemplazar al rey y sus límites y que habría una república y no monarquía, “es la piedra fundacional del constitucionalismo chileno”.
Plebiscito
Sobre el plebiscito, Ossa comentó “estamos discutiendo sobre la posibilidad de una nueva constitución, porque hemos sido conscientes denuesta historia, por legitimidad de origen de los 80 y porque no se ha legitimado en el tiempo. Hemos sido conscientes de que la historia importa y de cómo lograr que el pasado se una al presente y este al futuro, porque son pactos intergenaracionales”.
Agregando:
“Llegó el momento de hacer una nueva constitución, pero esa hoja en blanco hay que entenderla como algo nuevo, pero no como sinónimo de fojas cero”
Y sobre la discusión fue claro en decir que “se confunde la pregunta a qué debe ir en la constitución con cómo nos gustaría que fuera la sociedad. La primera es la que importa para esta discusión y aceptar que puede tener en el articulado cosas generales y no tan específicas”.
Y sobre su posición dijo: “Mi opción es apruebo y (con respecto a la derecha), es un error de cálculo político anclarse en una opción que no solo es probable que no vaya a ganar, si no que no da cuenta del problema fundamental simbólico e histórico al que no hemos visto enfrentados. Si no lo hacemos ahora, vamos a seguir discutiendo esto”.
Concluyendo, “la disputa Allamand-Desbordes ha sido sumamente peligrosa para el futuro de la centro derecha en la constituyente”.