Darío Calderón, maestro masón, conversó en Terapia Chilensis sobre los rumores que históricamente han girado en torno a la Gran Logia, que el próximo 21 de abril elegirá a su gran maestro.
“Siempre en la masonería ha habido un dejo de secretismo y suposición de determinadas cosas que no son. Creo que eso es porque la masonería no excluye a nadie, pero sí los masones hemos sido excluidos expresamente por algunas religiones y algunas instituciones muy señeras dentro de la República, y eso ha generado esta especulación general”, dijo Calderón.
Respecto a esto mismo, el también abogado, contrastó algunas prohibiciones históricas por parte del Gobierno con las libertades que, según él, promueven entre los masones.
“Durante el régimen militar hubo un decreto que prohibió a los marinos ser masones. La masonería nunca ha prohibido pertenecer a un partido político o lo que sea, porque nosotros creemos en las libertades del hombre“, aseguró.
También destacó que “los masones no son empresarios; son funcionarios, profesionales, médicos, ingenieros, profesores. Entonces no hay conflictos de interés porque no es el dinero lo que se mueve internamente”.
Además, sobre algunas críticas respecto a la segregación de las mujeres en la Gran Logia, Calderón reconoció que existe una necesidad de actualizarse.
“Lo que ha pasado en los últimos 50 años con la humanidad supera con creces lo que sucedió en 20 siglos, y esto nos obliga a tomar una posición. Participo de la idea de adecuarnos y pensar seriamente en la incorporación de la mujer en labores más activas y en la incorporación del transgénero“, concluyó.
FOTO: THE CLINIC
