Laura Albornoz a raíz de acoso sexual en U. Chile: “Se tienen que tomar las medidas normativas para sancionarlo y prevenirlo, y no estar respondiendo a contrapelo”
La abogada y académica de la casa de estudios se refirió a la amonestación que se le dio al profesor Carlos Carmona y a la petición que hizo un grupo de académicas de que el profesor se desvinculara de la universidad.
Después de que los estudiantes de la Facultad de Derecho de la Universidad de Chile depusieron la toma, Laura Albornoz conversó en Noticias en Duna sobre uno de los hechos que propició la toma feminista y es la acusación de acoso sexual por parte de una estudiante al académico Carlos Carmona.
Una de las peticiones del movimiento era que Carmona fuera desvinculado de la universidad, cosa que finalmente no sucedió. Después del sumario que duró cerca de ocho meses, la decisión fue separarlo de sus funciones por tres meses.
Al respecto, Albornoz declaró que ella y otras académicas le pidieron a Carmona que “pensara la decisión de su participación en estos hechos y diera un paso al costado renunciando a su rol de profesor y esto lo hicimos porque se llevo a cabo un sumario administrativo y la resolución concluyó que tenía que ser amonestado y suspendido de sus funciones por 3 meses, una decisión que acato, pero que es dispar a otras resoluciones que han sido motivadas por los mismos hechos, como el caso de un colega de la facultad de filosofía que fue destituido”.
Los argumentos que esgrimió la universidad son que no está tipificado el acoso sexual como delito dentro de la institución. Como lo explicó Albornoz, “no habían herramientas para adoptar otra decisión en el caso de Carlos Carmona, que lo entendemos, aunque no estamos de acuerdo, no logro entender porqué estamos tan lento en adoptar los estatutos administrativos y los mecanismos de sanción del acoso sexual”.
La abogada y académica también se refirió al pensamiento de muchos académicos de la facultad “hay varios colegas de la universidad que estiman que la salida del profesor es desproporcionada al actuar de él y esto responde a la visión patriarcal de que un profesor puede enamorarse o ilusionarse con una estudiante y que sus conductas no serían reprochables en la medida en que hubo por parte de la victima un actuar determinado. Esto es una repetición del modelo, la victima tuvo la culpa, no rechazó la conducta, es lo mismo que observamos con López. No le creemos a la victima, escuchamos a su abogada diciendo que hay datos que la victima puede ser responsable de los actos, es lo que viven las mujeres permanentemente frente a este tipo de violencia”.
Y por último Albornoz sentenció:
“Es un asunto que no puede ser tomado con livianda. En Chile pasan situaciones de abuso y acoso y se tienen que tomar las medidas normativas para sancionarlo y prevenirlo, y no estar respondiendo a contrapelo”.