José Miguel Vivanco: “Del canciller de Venezuela no espero absolutamente nada salvo una letanía de mentiras y falsedades. Esto es una práctica del régimen venezolano”
El director ejecutivo de Human Rights Watch para América Latina analizó las críticas a la primera exposición de la ex presidenta Michelle Bachelet como alto comisionado de Naciones Unidas y lo que será la presentación del canciller venezolano, Jorge Arreaza, ante la ONU.
“Es un resumen el que ella hace verbalmente, esta polémica me parece que no tiene mayor sentido”, aseguró José Miguel Vivanco, director ejecutivo de Human Rights Watch para América Latina, en Duna en Punto respecto de primer discurso de la ex presidenta Michelle Bachelet como alta comisionada de Derechos Humanos de la ONU.
La crítica al discurso de la ex mandataria es que, si bien condenó la violación de los derechos humanos tanto en Nicaragua y Venezuela, eliminó de su presentación los párrafos dedicados a esos países.
Revisa el discurso de Michelle Bachelet:
Al ser consultado sobre si Bachelet debió hacer referencia a esos dos países, Vivanco señaló que “si debió haberlo hecho (…) pero el puesto de ella es global y lo cierto es que solamente la masividad y la naturaleza de los hechos se dan en África y los conflictos armados brutales en el medio oriente, la obligan a poner atención en otros casos que solo en Latinoamérica”.
Sobre Venezuela, en el contexto en que el canciller Jorge Arreaza se reunió con la ex mandataria, Vivanco afirmó:
“Del canciller de Venezuela no espero absolutamente nada salvo una letanía de mentiras y falsedades, esto es una práctica del régimen venezolano”.
Respecto al éxodo masivo de venezolanos a otros países, el experto explicó que “el origen de la crisis está en Maduro, por lo que va a seguir si continúa la dictadura y el dictador haciendo y deshaciendo en el país”.
“Hay que seguir presionando ese régimen, aislándolo, aplicándole todo tipo de sanciones, hay que unir esfuerzos con Europa, Canadá y Estados Unidos para poder enfrentar esta dictadura”, aseguró.