El proceso de desgaste que ha venido sufriendo el gobierno de Francois Hollande, se coronó con el mal resultado del socialismo francés en las elecciones municipales. El resultado no solo se evidencia en una participación baja, sino también a quién termina yéndose la votación. Hay un caudal de votos que premia a la extrema derecha del Frente Nacional que va a terminar gobernando 15 ciudades. El otro ganador es el partido de Nicolás Sarkozy, la Unión para la Mayoría Popular, que terminó ganando 113 comunas de más de 30 mil habitantes.