Benjamín Nast y su clave para ser la revelación de la cocina chilena: “Hay que entender que siempre estás aprendiendo, que tú no sabes absolutamente nada”
El dueño del restaurant “De Patio” relató su ruta para convertirse en un destacado chef y cuál es la fórmula de su éxito. “Estoy de lunes a domingo prácticamente trabajando todo el tiempo y pensando qué es lo que puedo seguir haciendo”, confesó.
Benjamín Nast, chef y dueño del restaurant “De Patio”, quien fue elegido por el Círculo de Cronistas Gastronómicos como Chef del Año, conversó con Polo Ramírez sobre cómo llegó a formar este proyecto y su fórmula de trabajo.
El destacado cocinero contó que, tras ir de viaje, descubrió a qué quería dedicarse. Fue así como pasó por restaurantes de Berlín, Barcelona, Málaga y París aprendiendo. “Era muy difícil entrar a una pasantía”, relató. Pero insistiendo “semana tras semana” logró conseguir entrar como pasante por un mes al restaurant “Dos Palillos” de Albert Raurich en Barcelona.
“No me pagaban nada, pero lo di todo, y al mes estaba contratado como jefe de partida, a los seis meses era segundo cocina, terminé cuatro años trabajando con él (Albert Raurich) y fui parte de su equipo personal, me mandó a Berlín a trabajar como jefe de cocina, y así”, recordó el chef, que se aventuró fuera del país hace ya 10 años.
Nast comentó, además, cuál ha sido la fórmula que ha aplicado para transformarse en uno de los chefs más destacados e innovadores del país.
“Para mi la creatividad va relacionada directamente al trabajo. Creo que la inspiración, como esto de soñar e inspirarse, caminar y mirar las flores, los árboles y pensar en eso, no funciona así. Cómo yo funciono y cómo a nosotros se nos van dando los resultados en recetas, o la creatividad en los menús, es trabajando. Y trabajando muchas horas. Quizás tuve grandes maestros, pero que me enseñaron cosas muy buenas y cosas muy malas. Y quizás la parte mala es el trabajar más de lo que uno debiese. Eso significa levantarse más temprano de lo normal, estar más horas de lo normal dentro del trabajo”, reveló.
“O sea, yo estoy de lunes a domingo prácticamente trabajando todo el tiempo y pensando qué es lo que puedo seguir haciendo. Esa es la única manera de que las cosas sucedan. No puedes esperar que las cosas lleguen, tú tienes que ir por ellas. La única manera de que salga el mejor plato es agarrando el producto y desarmándolo de 50 mil formas, cocinándolo de 25 mil maneras, hasta que una vez salga algo bueno. Es decir, fallar el 90% de las veces para que la vez que acertaste salga algo increíble. Esa es la forma. Y entre eso, estudiar, leer libros, seguir a los grandes chefs. Entender que siempre estás aprendiendo, que tú no sabes absolutamente nada”, complementó.