1957 – . En Australia, un escolar llamado Denis Cox, se inquieta por el avance soviético en la carrera espacial y decide escribir una carta dirigida a “un científico importante” al campo de pruebas de armamento de la Real Fuerza Aérea Australiana. En ella incluye el diseño de un cohete que debe incluir una antena radar, distintivos australianos, torpedos aéreos, cuatro motores de jet Rolls Royce y “los otros detalles” que se le pudieran ocurrir al científico importante. A pesar de que pedía una respuesta, ésta no llegó. No al menos hasta 52 años más tarde, en 2009. Un espacio de Bárbara Espejo.