Kubrick III: La llegada del éxito y los conflictos

A Kubrick no le gustaba hacer ruido, o no de ese modo, y le costó aceptar la propuesta de Douglas para que dirigiera Espartaco. Encontraba que el argumento era pobre, no le gustaba el aspecto de súper producción e intuía problemas porque el guionista estaba en la lista negra de la censura estadounidense. Sabía también que la cinta sería un espaldarazo para su carrera.