Sobre la franja del Plebiscito, Eugenio García fue claro al decir que “es una fotografía bastante nítida de lo que está ocurriendo en el país. Responde a un fenómeno que no se había dado antes, que todo el mundo quiere hablar, más que escuchar y expresar sus inidgnaciones y la franja refleja eso”.
Agregando, “por eso es confusa, porque el país es confuso y todos estamos confusos y no puede ser de otra forma”.
Gracias comentó que “el sentimiento es un malestar, que no tiene una expresión única que pueda convocar a todos porque son distintos los malestares y en todas las acciones que vemos, no solo en la franja, veos estos malestares expresándose”.
Para García, es el reflejo de que estamos cambiando: “Estamos pasando de un mundo lineal y predecible, a un sistema complejo que no es articulable y funciona por sí mismo. Desde que tenemos acceso a internet, cambia todo el mundo y se convirtió en este sistema complejo donde cada uno es un nodo de esta nube de información y cada uno busca expresar lo que siente y vamos a tener que acostumbrarnos a vivir en un mundo en el que no hay liderazgos (…) vamos a tener que acostumbrarnos a eso y confiar más en la inteligencia colectiva que en los liderazgos individualistas”.
Sin embargo, como expresó, “esta sociedad que viene es de muchos individuos haciendo aportes al colectivo. No es una sociedad colectivista, no se van a convertir en comunismo, porque las identidades personales tienen un espacio para imponerse muy potente como las redes sociales. Desarticula el poder. Como no se puede controlar la información, es que el poder se distribuye”.
García fue optimista al pensar en la nueva sociedad que se va a construir: “Vamos a relacionarnos más desde el afecto y el amor, que desde la defensa del orden. Y eso implica cambiarlo todo, es un gran momento para ejercer la creatividad porque no sabemos la sociedad que viene”.
“Estamos viviendo una catarsis generalizada donde la gente está diciendo que está aquí y se impone de acuerdo a su estado de ánimo. Pero esto termina pasando en la medida en que se van tejiendo los espacios para expresarse y donde no se pone el pie arriba del otro. Y sabremos llegar a una nueva forma de relacionarnos, porque de esto se trata”.
Al comparar el plebiscito que se vivirá este 25 de octubre con el que decidió sacar a Augusto Pinochet del poder, García comentó: “no tiene la misma épica porque antes era si quiere a Agusto Pinochet sí o no, en esta ocasión es quiero tener mi espacio y ser reconocido tal cual y es un proceso más complejo”.
Por lo mismo, de acuerdo a su visión, es necesario “hacer nuevas constituciones no solo del país, también de las personas, de las familias, de las empresas. Tenemos que cambiar la manera de relacionarnos y para eso tenemos que llegar a nuevos acuerdos. Porque el contexto nos está moviendo a eso y si no lo hacemos, vamos a fracasar”.
Sobre el futuro, García es optimista: “Tengo el optimismo del que cree que finalmente las cosas se ordenan de una forma distinta. Vamos a pasar probablemente por mucha controversia y todo el próximo año por lo menos que esto va a seguir difuso, confuso y conflictuado, pero vamos a llegar a una solución que vamos a poder operar con ella y si no nos gusta, lo vamos a cambiar de nuevo”.
