De Sylvia a su mamá
1956 – Las mujeres recién habían sido admitidas en Cambridge, Inglaterra, cuando llega una alumna norteamericana rubia, alta, guapa y brillante, era Sylvia Plath. A pesar de su atractivo e inteligencia casi intimidantes, la poeta se confiesa en una carta a su mamá. Un espacio de Bárbara Espejo.