1931- Nikola Tesla, el genio de los relámpagos, padre de la corriente alterna que había asegurado: La electricidad soy yo, cumplía 75 años. No creyó nunca en los postulados de Marie Curie. Tampoco en los de Einstein, de hecho, declaró una vez que “Einstein es el mensajero de la época de ruido y de furia. Voy a escribirle y tratar de explicarle que el éter existe y que sus partículas son las que mantienen el universo en armonía y la vida en la eternidad”.
No se supo si efectivamente le escribió y le planteo sus diferencias al Premio Nobel alemán pero si hay registro de que Einstein, con ironía o franca estima, le envió una nota para su cumpleaños. Un espacio de Bárbara Espejo.