“Se han cumplido varios objetivos de los que se plantearon al principio. Uno de los logros es que se cumplieron todas las normas del reglamento, eso hay que destacarlo”, señaló.
Entre lo principal hizo un énfasis en lo que serán los “cambios al sistema político, descentralización del poder a nivel geográfico, la plurinacionalidad, el reconocimiento a derechos sociales y la democracia paritaria”.
“Lo que puede ser más difícil a fututo serían las autonomías regionales”, sostuvo, donde enfatizó positivamente que en la Cámara de las Regiones “todos los representantes van a ser de las regiones, no gente de Santiago que se va a una región en donde no viven”.
“Constitucionalistas siempre nos decían que la Constitución es una puerta que se abre con las guías de cómo queremos estructurar el Estado y que va a haber un tiempo en que va a haber reformas a esa Constitución, porque se van a dar cuenta que cosas quedaron mal y eso está bien”.
“Las constituciones responden a la situación de los países y a sus tiempos (…) ahora tienden a ser más largas porque incluyen más voces y participación”, explicó.
Repecto a la longitus de la nueva carta fundamental, mencionó: “Que tengamos tanta norma con tanto detalle es porque tenemos mucha desconfianza en nosotros y en el futuro”.
Al ser consultada sobre si la Carta Magna representaría un peligro, puntualizó que “siempre hay riesgo, pero creo que hay más riesgo de bloquear el cauce de los problemas de los conflictos sociales graves que tenemos”
