The Washington Post ya había adelantado la decisión que tomaría Estados Unidos frente al Consejo de Derechos Humanos de la ONU. Y esta tarde, se materializó.
La noticia de que EE.UU dejaba el Consejo la entregó la embajadora ante la ONU Nikki Haley y el secretario de Estado, Mike Pompeo.
Haley expresó:
“Tomamos este paso porque nuestro compromiso no nos permite seguir siendo parte de una organización hipócrita y centrada en sí misma que hace una burla de los derechos humanos”.
Entre las razones para la determinación, están:
1. Mostrtar una señal de solidaridad con Israel por las críticas que han recibido en el organismo internacional.
2. Ser “protector de los violadores de los derechos humanos y un sumidero político de parcialidad”. Haley citó la admisión de Congo como miembro del Consejo, incluso cuando se descubrieron fosas comunes allí, y el hecho de no abordar los abusos contra los derechos humanos en Venezuela e Irán.
Recordemos que anteriormente Estados Unidos se ha salido del Pacto de París, grupos económicos que no concuerdan con los interese del país, y ahora del Consejo de DD.HH de la ONU.
Esta es la primera vez que un miembro de los 47 países se retira del Consejo.