Después de la fecha de votación en el Reino Unido, donde los ciudadanos le dieron el triunfo al Brexit, el número de personas que llegó al país fue de 230 mil, lo que representa una caída del 46%.
Según datos de la Oficina Nacional de Estadísticas, la caída de 106 mil inmigrantes es la mayor desde 1964.
Al mismo tiempo el número de personas que abandonó el Reino Unido en el mismo periodo llegó a los 123 mil, creciendo un 29%. Estos datos superan las cifras de la gran recesión de 2008.
Sin embargo, la promesa de Theresa May, quien se comprometió a fijar la inmigración por debajo de las 100 mil personas al año, está lejos de cumplirse.
Además, aún siguen siendo más los ciudadanos europeos que llegan al Reino Unido de los que se van.