Como informó la Casa Blanca a través de un comunicado, “el Presidente Donald Trump declaró que existe un gran desastre en el territorio autónomo de Puerto Rico y ordenó asistencia federal para complementar los esfuerzos de recuperación locales del territorio en las áreas afectadas por el huracán María”.
El paso del huracán dejó a Puerto Rico completamente destruida y al ser declarada como zona de “gran desastre”, se liberan fondos federales para atender la devastación en la isla que ya se encontraba en banca rota antes del paso del huracán con una deuda de 74.000 millones de dólares.
Dentro de la asistencia se contemplan fondos para la creación de albergues, reparación de viviendas y programas específicos para que personas y emprendedores recuperen sus bienes.
Recordemos que María entró a Puerto Rico el miércoles en la mañana con categoría 4 y dejó un muerto.