El ex presidente de Barsil, Lula da Silva, fue condenado este miércoles a nueve años y medio de cárcel por los delitos de corrupción y lavado de activos.
La sentencia fue entregada por el Juez Sergio Moro, en el marco de la investigación del caso Lava Jato, quien determinó que el ex mandatario recibió sobornos de la empresa constructora OAS, una de las más grandes del país.
Según la investigación, entre las ventajas que recibió Lila además están departamento tríplex de 215 metros cuadrados en un complejo nuevo en Guarujá, en el litoral del estado de San Pablo. A cambio de estos “favores”, el ex presidente y líder sindicalista, habría facilitado contratos millonarios a esa compañía con Petrobras, según se desprende de la investigación.
“Estamos apelando y probaremos su inocencia en todas las cortes imparciales, incluyendo las Naciones Unidas”, señaló un asesor del bufete en un mensaje a la AFP.
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