El miércoles Teherán (Irán) fue víctima de un doble atentado terrorista perpetuado por una célula de DAESH (ISIS). Un ataque sin precedentes en el país asiático que acabó con la vida de 17 personas y dejó 42 heridos.
A las 10:30 de la mañana cuatro hombres armados con fusiles Ak-47, irrumpieron en el Parlamento iraní durante una sesión de la Asamblea, donde asesinaron a un guardia de seguridad y civiles. Hasta el momento se desconoce si algún diputado se vio afectado por el ataque.
The moment terrorists storm visitors’ hall of Iran’s parliament building pic.twitter.com/EHvsaAXm1e
— Press TV (@PressTV) 8 de junio de 2017
Uno de los terrorista se inmoló en el cuarto piso, mientras los otros fueron asesinados por fuerzas especiales.
En un principio la sesión del Parlamento, dirigida por el presidente de la institución, Ali Larijani, no fue suspendida.
“Es un incidente de menor importancia“, consideró el titular de la Cámara, quien aseguró que las fuerzas de seguridad se ocuparían del tema.
Posteriormente fue inevitable detener la reunión.
En paralelo, en el emblemático mausoleo donde yace la tumba del iman, Ruholá Khomeiní, fundador de la República Islámica de Irán en 1979, dos terroristas suicidas detonaron chalecos explosivos, resultando heridos cuatro peregrinos.
“Los cinco terroristas identificados se unieron a Daesh, dejaron el país y participaron en crímenes cometidos por el grupo terrorista en Mosul y Raqqa”, señaló un comunicado ministerial.
La información fue corroborada por el mismo órgano terrorista a través de su agencia propagandística Amaq.
“Combatientes del Estado Islámico atacaron el mausoleo de Khomeiní y la sede del parlamento en Teherán”, señaló el órgano de comunicaciones.
Irán no vivía un ataque así desde 1979, perpetrados, la mayoría de ellos, por la organización armada de los Muyahidines del Pueblo, en los años posteriores a la revolución islámica.
