El legado y el fracaso de Obama

Escucha la nota de Duna En Punto con el legado de Obama

Con la misma frase esperanzadora que popularizó durante su campaña presidencial en 2008, el presidente Barack Obama pone punto final a su mandato. El carismático senador que logró cautivar con su retórica de cambio y pasó a ser el primer mandatario afroamericano, lleva adelante hoy su último día en el cargo en la Casa Blanca.

Al igual que su antecesor, George W. Bush, Obama fue reelecto en 2012, pero el próximo 20 de enero le entregará la Casa Blanca a uno de sus enemigos políticos: Donald Trump. Eso, a pesar de su alta popularidad. A pesar de que un 55% considera a Obama un buen presidente, no logró traspasar su éxito a Hillary Clinton.

“Para ser bien crudo, una medida de la eficacia de un gobierno es que tenga un sucesor de su mismo pelaje, entonces no tengamos doble estándar. En el caso de Obama el no tener un sucesor de su mismo pelaje, no obstante los 2 millones 600 mil votos más que tiene, es también un fracaso”, explica el abogado y cientista político, Genaro Arriagada.

El mandatario demócrata inició el primer mandato en medio de la caída libre de la economía. Una crisis inmobiliaria que provocó una crisis financiera arrasando con bancos y líderes de Wall Street. Pero la administración Obama logró salir a delante reduciendo el desempleo al 4,9%, su tasa más baja desde antes de la crisis. Y desde 2015 los ingresos netos de las familias han vuelto a aumentar.

Una evaluación positiva también ha tenido diplomacia en el cambio climático.  Apeló a las energías renovables haciendo a un lado el carbón. En Irán logró que Teherán firmara un acuerdo que limita estrictamente su desarrollo nuclear  y su acercamiento a Cuba, con visita incluida, será recordada como la política más exitosa para el restablecimiento de las relaciones bilaterales, tras medio siglo de bloqueo y la apertura de embajadas en ambos países.  Sin embargo uno de los momentos más recordados por sus compatriotas, será la muerte de Osama Bin Ladem.

Pero el legado de Obama es tanto para el mundo, como para su país. Una de sus promesas de campaña más embláticas la lanzó en 2010, la Ley de Protección al Paciente y Cuidado de Salud Asequible, más conocido como Obamacare. A partir de 2012 esta nueva normativa logró extender los seguros médicos a más de 20 millones de estadounidenses, especialmente de bajos recursos. Sin embargo, esta no es una medida que Donald Trump intentará continuar, más bien todo lo contrario.

“El Obamacare le va a costar a Trump desmontarlo totalmente, porque incluso hay gente en el mismo Partido Republicano que no quiere que se desmantele”, explicó el académico de la Universidad Diego Portales, Fernando García.

Pero otros hechos de su administración, también han generado críticas. Aprobó ataques aéreos en Libia para derrotar a Gadaffi, mientras ese país sigue sumido en la anarquía. Volvió a involucrar militarmente a EEUU en Irak para frenar el avance del autodenominado Estado Islámico. Y cuando el ejército estadounidense reforzaba su presencia en Afganistán, fue galardonado con el Premio Nobel de la Paz. Además, otros sucesos como no poder cerrar la Cárcel de Guantánamo, la guerra Civil en Siria y sus relaciones con Rusia han marcado las críticas a su gestión.

Con la llegada del primer presidente de raza negra a la Casa Blanca muchos pensaban que se iba a marcar un punto de quiebre entre las divisiones raciales que han marcado históricamente a Estados Unidos, pero las tensiones aumentaron.

Ferguson, Charleston, Nueva York y Baltimore, tienen en común ser el escenario de asesinatos de afroamericanos desarmados en manos de la policía y civiles, generando olas de protestas en todo el país.  Estos hechos abrieron un nuevo debate: cómo controlar el acceso a las armas de fuego.

El próximo capítulo en la vida de Obama comienza el viernes al entregar el mando. Como ex presidente tendrá mayor libertad para decir lo que piensa, fijar su propia agenda y ganar dinero. Incluso, ya anticipó un libro que quiere escribir.

A los 55 años, Obama será un ex presidente relativamente joven con una larga vida después de la Casa Blanca. Ha descartado presentarse como candidato a otro puesto , al igual que su esposa Michelle,  pero ha prometido mantener una presencia activa en la discusión de asuntos nacionales. Claramente nos queda Barack Obama para rato.