Cerca está Azul Azul de plasmar uno de los sueños más grandes de los hinchas de Universidad de Chile: El estadio propio.
Desde enero, la concesionaria ha dado señales claras en esa dirección y todo indica que pronto se adquirirá el terreno para la construcción del recinto deportivo. Según informó La Tercera, después de buscar en varias zonas de la Región Metropolitana, la comuna de Lampa parece ser la elegida, ya que cumple con las condiciones y cuenta con el apoyo del directorio. Se espera que en las próximas semanas se oficialice esta decisión.
La sociedad anónima anunció en enero que su Plan Estratégico contempla siete etapas, y que ahora se encuentra en la séptima, que consiste en la adquisición del terreno para la infraestructura deportiva de la U. Esta fase debería concretarse en el primer semestre de 2023, y luego se buscarán los permisos necesarios para llevar a cabo la materialización del proyecto.
Para Azul Azul, esta obra es crucial para alcanzar logros deportivos y un crecimiento institucional completo. La promesa de tener un estadio propio parece estar más cerca de hacerse realidad.
Pensando en el 2030
En este caso, el sueño de la U se alinea con una necesidad importante: la construcción de un nuevo estadio que pueda ser utilizado en la postulación de Chile para organizar el Mundial de Fútbol de 2030. Esta iniciativa coincide con la línea de pensamiento de la actual Ministra del Deporte, Alexandra Benado, quien ha destacado la importancia de tener un recinto con gran capacidad para recibir un evento de esta magnitud.
La Ministra afirmó que
“como país merecemos tener partidos decisivos en nuestro Mundial y que, aunque ya contamos con estadios que podrían recibir encuentros de la fase de grupos, octavos y cuartos de final, queremos tener recintos que puedan albergar partidos de mayor relevancia.”
En cuanto a la construcción de un nuevo estadio para la U, la Ministra comentó que desconoce el modelo de negocio actual de la Universidad de Chile y si tienen planes a corto o mediano plazo para construir uno. En su opinión, lo público y lo privado deben trabajar juntos en el deporte para avanzar y para que más personas tengan acceso a él.