Un informe del Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica (CELAG) alerta sobre los peligros del modelo económico implementado por Javier Milei, destacando que podría llegar a su fin a lo largo de este mismo año.
Según los economistas de esta institución, Guillermo Oglietti y Alfredo Serrano Mancilla, el plan económico del actual presidente de Argentina presenta claras similitudes con la ley de ‘convertibilidad’ que rigió entre 1991 y 2002. Este plan estableció una equivalencia de “uno a uno”entre el peso argentino y el dólar estadounidense, sin embargo, culminó en una crisis económica, social y política en 2001.
El modelo de Milei
En el caso del modelo de Milei, los expertos advierten que, con una aplicación intensiva y de alto impacto en un corto periodo, ya se están alcanzando los límites que llevaron a la caída de la convertibilidad.
“Milei, en un año como presidente, ha pisado tanto el acelerador que, a día de hoy, ha cumplido 6,8 años del ciclo de la convertibilidad, lo que equivale al 62% de los 11 años que duró este plan”, calcularon los expertos.
Además, fueron enfáticos al decir que con la rapidez que va este modelo “el esquema económico de Milei encontrará los límites que dieron fin al modelo de la convertibilidad antes de terminar el 2025”.
Uno de los puntos más críticos del análisis es la caída de los ingresos de los hogares en términos reales, lo que ha impactado directamente en el poder adquisitivo de los trabajadores, con una baja significativa en la participación de los salarios en el Producto Bruto Interno (PBI). En este sentido, el modelo de Milei la bajó en solo un año al 43,2% -desde el 45,5% de 2023- por el “desplome” de los salarios reales.
“La predisposición que tiene el Gobierno nacional a desregular toda la economía -a excepción de las pretensiones salariales de los trabajadores en los convenios colectivos- indica que seguirá el mismo derrotero de caída sin recuperación a la vista”, aseveró el informe, que también marca un alza más acelerada en la tasa de desempleo respecto al ciclo de la ‘convertibilidad’.
En cuanto a las reservas internacionales, los expertos señalan que durante la convertibilidad, las reservas internacionales del Banco Central argentino, llegaron a un máximo de 35.000 millones de dólares en 1998, cifra que, ajustada por la inflación, equivaldría a 67.000 millones de dólares en la actualidad.
Bajo el gobierno de Milei, las reservas también parecen haber tocado un techo en torno a los 30.000 millones de dólares.
Por otra parte, los expertos señalaron que en ambos modelos hay un atraso cambiario (abaratamiento del precio del dólar como instrumento para controlar la inflación), exponiendo a la producción argentina a la competencia externa en condiciones desventajosas.
Los economistas concluyen que el modelo actual “está adelantando etapas y envejeciendo prematuramente, pero lo hace a distintos ritmos”.