Los conceptos físicos y químicos que explican por qué el cielo es azul
La luz azul, debido a su menor longitud de onda, se dispersa mucho más que otros colores al chocar con estas moléculas. Esto hace que el cielo, durante los días despejados, se vea azul desde cualquier dirección.
Explicar por qué el cielo es azul puede parecer algo muy simple, sin embargo, existe una explicación que combina la física y química.
Fue en 1870 cuando el físico británico John William Strutt, conocido como Lord Rayleigh, describió por primera vez el fenómeno que da al cielo su característico color azul, este fue presentado como la dispersión.
¿Por qué se produce este fenómeno?
El aire que respiramos, compuesto principalmente por nitrógeno y oxígeno, está formado por partículas diminutas llamadas moléculas. Cuando la luz del sol atraviesa la atmósfera, interactúa con estas moléculas y, en ocasiones, choca de forma directa con ellas.
Sin embargo, la luz solar no solo está compuesta por un color, su espectro de colores incluye rojo, naranja, amarillo, verde, azul, índigo y violeta.
Pero, ¿por qué solo se ve el azul?
La luz azul, debido a su menor longitud de onda, se dispersa mucho más que otros colores al chocar con estas moléculas. Esto hace que el cielo, durante los días despejados, se vea azul desde cualquier dirección.
Sin embargo, el cielo no siempre es azul y es el mismo fenómeno de la dispersión de Rayleigh que explica que al amanecer y al atardecer, cuando el Sol está cerca del horizonte, la luz atraviesa una mayor cantidad de atmósfera antes de llegar a nosotros.
En este recorrido más largo, los colores azul y verde se dispersan casi por completo, dejando que predominen los tonos rojos y naranjas.
Por otro lado, si la Tierra no tuviera atmósfera, como la Luna, el cielo sería oscuro, incluso durante el día. Esta ausencia de dispersión también es lo que permite que los colores de un arcoíris, los cuales son formados por la descomposición de la luz en gotas de agua, sean visibles en todo su esplendor.
