“He recibido muchos regalos, por cierto, pero hay uno extraordinario que el Gobierno le ha hecho a todo el país, que es no perseverar en la ley de aborto libre”, dijo el cardenal, Fernando Chomalí durante la misa de Navidad en la Catedral de Santiago.
Y es que el religioso ha iniciado una ofensiva en contra del proyecto que prometió el Presidente Gabriel Boric para ser presentado antes del término de su mandato.
Frente a esto, la ministra de la Mujer, Antonia Orellana, respondió en duros términos al líder de la iglesia católica nacional, señalando en Cooperativa que “las decisiones que se toman no se toman pensando en los deseos de los príncipes de la iglesia, que es lo que significa ser un cardenal”.
“La verdad es que, tal como hemos señalado, se ha aplazado a propósito de que el Presidente hizo dos anuncios el 1 de junio. Uno, el ingreso de un nuevo reglamento respecto a las tres causales, y que eso se tramita a nivel interno en la Contraloría General de la República, y en segundo lugar, el proyecto de ley”, recalcó la secretaria de Estado.
Siguiendo esta línea, Orellana reconoció que el reglamento se ha demorado “más de lo que hubiese esperado”, responsabilizando “una gran cantidad de inscritos en contra, por ejemplo también de los obispados de la iglesia chilena, que quisieran referirse a embarazos muy complejos, que a constatar la realidad es que, a siete años de aprobar la ley de interrupción voluntaria de embarazos, tenemos que recibir aquí en Santiago a niñas violadas, a niñas que tienen un embarazo avanzado y que están al borde de las semanas, porque el sistema sanitario con el reglamento actual no logra atenderlas en su región de origen”.
Orellana y el retraso en la presentación del proyecto de aborto
“No me interesa a mí entrar en un debate con la Iglesia Católica en esto. No creo que sea la única voz, creo que ha habido muchas más voces que se han expresado estos días, y no solamente la de la Iglesia, y creo que sería bueno, en un debate democrático, que las tomáramos todas”, lanzó Orellana.
Pese a ello, la militante del Frente Amplio recalcó que desde el Gobierno efectivamente se presentará el proyecto que buscará despenalizar el aborto y que, de momento, “es una razón técnica”.
“De hecho, le ha sido explicada varias veces a las organizaciones, entre ellas a la Coordinadora 8M, así como a otras muchas organizaciones de mujeres de profesionales de la salud”, profundizó.
En este escenario, la ministra insistió en que actualmente en Chile hay “un mercado negro gigantesco” del aborto y que “una de las recomendaciones del sistema internacional es avanzar en una despenalización del delito de aborto y además en un esquema de acceso seguro”.