Una decisión que marca un hito en la relación entre los medios de comunicación y las redes sociales, específicamente en la red social X, ex Twitter, varios diarios internacionales han anunciado su salida de la plataforma de Elon Musk. Los primeros en dar a conocer esta medida fueron el diario británico The Guardian y el español La Vanguardia, quienes argumentaron que los aspectos negativos de la plataforma superan sus beneficios.
¿Por qué esta drástica decisión?
The Guardian comunicó su decisión a través de las 80 cuentas que posee en X, alegando que los recursos que destinaba a la red social serán ahora usados para promover su periodismo en otros canales. El medio británico criticó abiertamente el contenido perturbador que prevalece en la plataforma, señalando que se fomenta la difusión de teorías de conspiración y discursos racistas. Además, hicieron responsable a Elon Musk de la forma en que ha permitido que tales contenidos se propaguen, especialmente durante la campaña presidencial de Estados Unidos, la cual, según The Guardian, resaltó los problemas inherentes de X.
Por su parte, La Vanguardia expresó razones similares, acusando a la plataforma de promover contenido que atenta contra los derechos humanos, incluyendo odio hacia minorías y misoginia. El medio español agregó que tales publicaciones, a menudo virales, captan más tiempo de los usuarios, lo que contribuye a aumentar las ganancias publicitarias de la plataforma. A pesar de que la salida de X podría resultar en una pérdida de tráfico y suscriptores, el director del diario, Jordi Juan, destacó que la decisión era necesaria para no respaldar un espacio que ha devenido en un caldo de cultivo para desinformación y teorías de conspiración.
Otros medios involucrados
En paralelo, medios franceses como Le Figaro, Le Monde y Le Parisien, entre otros, han anunciado su intención de demandar a X ante el Tribunal Judicial de París por el uso no remunerado de sus contenidos, en violación de los derechos de autor. Estos medios, junto con la agencia AFP, habían iniciado previamente un procedimiento legal contra la plataforma, que se negó a negociar una compensación por el uso de sus materiales periodísticos.
Este giro en la relación entre medios tradicionales y plataformas digitales refleja el creciente malestar en la industria por la gestión del contenido y los derechos de autor en las redes sociales, y pone de relieve la tensión entre las ganancias comerciales y la responsabilidad ética en la era digital responsabilizando ante todos estos hechos a Elon Musk.
