El ministro de Justicia y Derechos Humanos, Luis Cordero, se refirió a la opción de cerrar el penal de Punta Peuco, donde se mantienen encarcelados condenados por delitos de lesa humanidad durante la dictadura de Augusto Pinochet.
De acuerdo a lo publicado por La Segunda, el secretario de Estado envió un oficio a la Cámara de Diputadas y Diputados, donde explicó las razones de su rechazo a la alternativa de terminar con dicha cárcel o reconvertirla.
“Atendida la situación de sobrepoblación que actualmente enfrentan los establecimientos penitenciarios en todo el país, en concepto de esta Administración no aparece como conveniente impulsar medidas que impliquen el cierre de establecimientos o el traslado masivo de personas privadas de libertad entre distintos recintos penales”, expresó el ministro de acuerdo al medio antes mencionado.
Es en este contexto, el abogado señaló que están ante “un problema en general de sobrepoblación y, por lo tanto, nosotros no podemos prescindir de ese penal”.
Además, detalló que “la zona donde se encuentra Punta Peuco, es una zona donde además hay un centro del Sename y además hay otro terreno que Gendarmería ha querido tratar de desarrollar, hace un tiempo, y una de las principales dificultades que hay es el acceso a agua”.
De igual manera, desde el Ministerio se desechó la opción de que Punta Peuco se transforme en una cárcel para reclusas embarazadas o con hijos pequeños.
Según el escrito, “la ubicación geográfica del Centro de Detención Preventiva y Cumplimiento Penitenciario Especial Punta Peuco no lo hace un lugar idóneo” para estos fines.