Las horas de sueño afectan notoriamente nuestro estado de ánimo durante el día, pero incluso, la salud mental también podría verse perjudicada si no se duerme lo suficiente.
Así lo resaltó un estudio de la Universidad de Stanford, que identificó que aquellas personas que logran dormir más temprano, tienen menos probabilidades de padecer alguna patología mental.
En concreto, la investigación indicó que la hora ideal para dormir es a las una de la mañana, y que “existe una gran cantidad de datos que indican que vivir alineado con tu cronotipo es muy importante”.
Para llegar a estos datos, los especialistas analizaron el comportamiento del sueño de 75 mil adultos del Reino Unido durante una semana con un acelerómetro portátil, buscando analizar la alineación de los cronotipos.
Del total de los participantes, 19.065 los catalogaron como tipo matutino, 6.844 vespertinos y 47.979 del tipo intermedio, mientras que el 25% de los que dormían más temprano se identificó como durmientes tempranos, el 25% más tardío como durmientes tardíos, y el 50% intermedio como durmientes intermedios.
Luego de analizar los datos médicos de los participantes, los investigadores resolvieron que alinearse con el cronotipo no es la mejor manera de dormir, de hecho, lo recomendable es no coincidir con el horario para dormir.
De esta forma, desde los noctámbulos como los madrugadores evidenciaron una gran salud mental si es que no tenían una coordinación con su cronotipo, aunque de acuerdo al estudio, “el peor de los casos es, sin duda, que la gente que se queda despierta hasta tarde”.
Respecto a las opciones de padecer cuadros de salud mental, los noctámbulos que se alineaban con su cronotipo, según el estudio, tenían un 20% más de probabilidades de tener un trastorno mental, mientras que los noctámbulos que sí lo hacían tenían hasta un 40%.