Un importante hito astronómico logró China, luego de que la sonda Chang’e 6 que recogió una serie de muestras en el “lado oscuro de la luna”, aterrizara en la región septentrional china de Mongolia Interior.
La misión espacial logró recolectar cerca de dos kilos de rocas lunares, que se compararán con otras extraídas del lado luminoso del satélite para encontrar nueva información sobre las principales diferencias entre ambas zonas de la luna.
Esta es la primera vez en la historia en que una sonda logra recolectar este tipo de material con éxito, algo que cobra mayor relevancia, ya que la expedición solo contó con 14 horas para realizar la operación y se enfrentó a altas temperaturas y escasa comunicación.
En concreto, extrajeron las rocas de la Cuenca Aitken-Polo Sur, uno de los sectores más grandes y antiguos de la luna, con 2.500 kilómetros de largo y 3 de profundidad.
De momento se sabe que debido a la gravedad de la Tierra ha sincronizado la traslación y rotación del satélite, lo que genera que siempre muestre la misma cara a nuestro planeta
Además. el lado oscuro de la Luna sería un terreno ideal para instalar equipos científicos, ya que esta zona cuenta con más cráteres, un terreno accidentado y no tiene interferencias electromagnéticas terrestres.
Próximas investigaciones en la luna
En China, se debate actualmente si publicar los resultados en revistas científicas internacionales o presentar las conclusiones en instancias locales y en idioma chino.
Por otro lado, el país asiático ya proyecta sus próximas expediciones al espacio en el polo sur de la Luna: Chang’e 7, con el que intentarán instalar una base científica junto a Rusia.
Esta misión se estima que se lleve a cabe en 2026, donde buscará depósitos de hielo de agua. Además, se tiene pensado una octava versión de la sonda, que será lanzada en 2028 y que intentará explotar posibles recursos que puedan usarse y que preparará una posible misión de Chang’e 9.