Los nombramientos de ministros en el Poder Judicial (PJUD) han estado en el ojo del huracán durante estas últimas semanas, luego de que se revelaran una serie de chats donde se advierten supuestas maniobras de tráfico de influencias.
En este sentido, el ministro de Justicia, Luis Cordero, ha tenido un rol activo en estos temas, llamando a revisar las formas en que se designan a los magistrados y cómo se maneja este poder del Estado.
Ahora, el secretario volvió a referirse a esta situación, en el programa Desde la redacción, de La Tercera: “La gran interrogante en el caso de los funcionarios judiciales, pero también de otros funcionarios públicos, son los vínculos que puedan tener con otros sectores”.
Siguiendo esta línea, el ministro llamó a tener cuidado con las “comunicaciones impropias, que pueden afectar potencialmente la independencia”, pero que se deben investigar correctamente, ya que “una cosa muy distinta es si son delitos o no”.
“Si se lo reduce a ese binomio (delito-no delito), o extiende las categorías de delito, o excluiría de la discusión una cantidad de cuestiones que son impropias en un sistema democrático”, indicó.
“Uno de los aspectos que pone en riesgo la independencia judicial es cuando puedan existir conductas impropias o comunicaciones impropias entre miembros del Poder Judicial y la política o miembros del Poder Judicial y los sectores económicos, porque hay zonas de intersección”, detalló.
Además, el titular de Justicia, resaltó que el Poder Judicial debe “no solo ser independiente, sino que parecer independiente”.