Resilientes pero ansiosos: Radiografía a los estudiantes chilenos
Un aspecto positivo dentro del estudio es que Chile es el país con mejor relación de los estudiantes con los docentes.
El Survey on Social and Emotional Skills, o Estudio de Habilidades Socioemocionales, en español, es una investigación realizada por una serie de países alrededor del mundo donde se miden las emociones y habilidades sociales de los estudiantes y por primera vez se realizó en Chile.
De acuerdo a la Agenda de Calidad de la Educación, responsable de la medición, “es uno de los primeros esfuerzos internacionales por crear un repositorio de información sobre las habilidades socioemocionales”.
En él se utilizó información de 16 habilidades socioemocionales, sobre el contexto escolar y del hogar del estudiante. Además, se incluyeron apoderados, docentes y estudiantes de 15 años.
Uno de los principales hallazgos del estudio es que los estudiantes chilenos de bajos estratos sociales logran tener buenos resultados académicos, superando incluso el 75% de las y los estudiantes del país en los índices de bienestar y satisfacción con la vida. Esto hace a los estudiantes nacionales, junto a los peruanos, ser de los más resilientes a nivel mundial.
Pese a esto, nuestro país tiene una de las mayores brechas socioeconómicas y culturales entre estudiantes del mundo, siendo uno de los pocos países participantes del estudio en mostrar claras diferencias en este segmento.
Altos niveles de ansiedad
Uno de los resultados más importantes obtenidos con este estudio es el alto nivel de ansiedad que presentan los estudiantes chilenos durante las distintas tareas educacionales.
Por ejemplo, el 79% de los alumnos chilenos reconocieron sentirse ansioso antes de una prueba, mientras que el promedio mundial es del 62%.
Si bien, este indicador no evidencia diferencias entre niveles socioeconómicos, sí lo hace entre sexos, ya que las mujeres, en promedio, superan a los hombres por 5.6 puntos en los niveles de ansiedad antes de una prueba.
Otro punto alarmante es que, en general, los estudiantes nacionales tienen menos satisfacción con la vida si se compara con el promedio mundial. De acuerdo a la medición, el 61% de los alumnos chilenos se sentían satisfechos, mientras que a nivel mundial esas cifras alcanzan el 68%.
Aquí sí se muestran diferencias entre grupos socioeconómicos, ya que los menores más aventajados se sienten más satisfechos con su vida que los alumnos de estratos bajos, mientras que lo mismo pasa entre hombres y mujeres, siento estas últimas, menos felices.
Durante el estudio también se midió la autopercepción corporal y física de los menores, arrojando que el 52% de los alumnos en Chile les gusta su cuerpo, mientras que a nivel mundial, esas cifras llegan al 64%.
Las mujeres y los alumnos más desaventajados son quienes menos les gusta su cuerpo, de acuerdo al estudio.
En concreto, los niveles de bienestar psicológico en los estudiantes chilenos están por debajo si se comparan con los números globales, siendo los más afectados los grupos desaventajados y las alumnas.
Buena relación con los docentes pero mala con los demás
Un aspecto positivo dentro del estudio es que Chile es el país con mejor relación de los estudiantes con los docentes, donde más de la mitad de los alumnos reconoció tener una sana convivencia con su profesor o profesora.
Pese a ello, las relaciones interpersonales, en promedio, son malas dentro de los centros educacionales chilenos, ya que solo el 48,5% de los alumnos dijo tener buena relación con los demás, por debajo del promedio mundial.
En esta medición se repite la misma situación que en las demás: las mujeres y los estratos sociales bajos están por debajo de los hombres y de los alumnos aventajados.
Sin embargo, la medición dio como resultado que en el último año el 38% de los estudiantes chilenos no han recibido bullying nunca o casi nunca, por debajo del 45% del promedio mundial.
Por su parte, el 35% dijo que no recibió bullying pocas veces en el año (cinco porciento más que el promedio mundial), mientras que 27% reconoció recibirlo pocas veces en el mes o en el año, algo muy similar al resto del mundo.
Aquí no hay diferencias grandes entre estratos sociales, aunque las mujeres suelen recibir menos bullying que los hombres.