Un cambio de nombre y actores que se bajaron a última hora: Las historias de Cuatro Bodas y un Funeral a 30 años de su lanzamiento
La cinta, inesperadamente fue un completo éxito y todos quienes trabajaron en ella lanzaron sus carreras, llegando a duplicar sus ofertas luego del estreno de la película.
En mayo de 1994 se estrenó Cuatro Bodas y un Funeral, una de las películas de humor y romance más icónicas del último tiempo, un completo éxito de taquilla dirigida por Mike Newell.
La cinta inspirada en la novela de mismo nombre, escrita por E. M. Forster en 1971, hoy, a 30 años de su producción, es un clásico del cine, sin embargo, sus orígenes estaban bastante lejos de eso, e incluso, estaba más cerca de ser una película más.
De hecho, su rodaje estuvo rodeado de problemas económicos que llevaron a acotar las grabaciones a pocas semanas, pero que dejaron resultados pocos esperados por el director y los actores protagonistas.
La selección de los protagonistas
Algo fundamental a la hora de planificar la cinta fue la selección de los protagonistas. El primero en ser buscado era el actor que encarnaría a Charles, el hombre de la relación.
Para ello, se barajaron cerca de 70 nombres para que sea parte del proyecto, dentro de los cuales no estaba el de Hugh Grant. Los candidatos eran jóvenes que recién empezaban sus carreras y algunos más experimentados.
Tras la aparición de Grant, se ganó un puesto entre los tres finalistas para competir por quedarse con el papel. Además de él, Alex Jennings y Alan Rickman.
Luego de las audiciones, el guionista de la película, Richard Curtis, se negó rotundamente a la inclusión de Grant al proyecto. “Me preocupaba que fuera demasiado guapo, y yo era consciente de que el personaje era percibido como demasiado elegante”, señaló años más tarde.
Frente al cambio de último momento decidieron buscar a una nueva actriz: Andie MacDowell, otra consolidada intérprete que aseguraba un peso importante en la taquilla.
Una caída de último momento
Con la apuesta de Grant, los directivos de la película debía buscar a su compañera, Carrie, que a diferencia del responsable de encargar a Charles, sería una experimentada actriz.
Para ello, viajaron a Los Ángeles, donde casi 20 actrices fueron partícipes de las audiciones, donde resaltaron Jennifer Jason Leigh y Mary Stuart Masterson y Marisa Tomei, pero se decantaron por la última.
Tomei venía de ganar un Oscar por su rol en Mi primo Vinny.
Estaba todo listo para que la actriz del momento fuera la protagonista de la cinta, de hecho, Tomei ya tenía listo el pasaje para viajar al Reino Unido a grabar, pero debido a la muerte de un familiar, decidió dejar el proyecto.
Frente al cambio de último momento. decidieron buscar a una nueva actriz: Andie MacDowell, otra consolidara intérprete que aseguraba un peso importante en la taquilla.
Los problemas en la grabación
Con el grupo de actores definidos, ahora quedaba iniciar las grabaciones, que estaban programados para iniciarse en 1992, pero, esto no fue así, debido a problemas en el financiamiento de la película, lo que llevó a que el rodaje se retrasara, al menos en un año.
Además, los escasos recursos con los que contaba la producción obligó a que los días de rodajes se redujeran a 36 días.
“Nos enfrentamos a eso en todo momento, pero todos éramos jóvenes y seguimos adelante. Era un guion maravilloso y fue un placer ver cómo se desarrollaban las escenas”, confesaría Mike Newell a Deadline años más tarde.
Tras todas las dificultades que debieron sortear, apareció una nueva complicación, cuando la cinta estaba casi lista, ya que las distribuidoras estadounidenses solicitaron un cambio de nombre de la película, acusando que tendría una mala recepción en el público masculino.
Pese a esto, los directivos de la cinta desecharon dicha opción y persistieron en mantener el título originar de la cinta.
Inesperada recepción
En enero de 1994 se mostró la cinta pro primera vez en el festival de Sundace, en un estreno que no comenzó de la mejor manera, debido a su rupturista guion con muchos insultos en los primeros minutos de la película, lo que generó que una serie de asistentes se fueran del lugar.
Pese a esto, las críticas avalaron el trabajo del guionista y los actores, catalogando a la película como una muy buena cinta. Estos positivos resultados se sumaron al éxito que tuvo la cinta en su estreno en Estados Unidos, lo que llevó a ampliar los cines que la proyectaron.
En total, recaudaron US$ 30 millones solo en Norteamérica, haciendo que llegue al Reino Unido como un fenómeno de Estado Unidos.
En resumen, Cuatro Bodas y un Funeral fue un completo éxito y todos quienes trabajaron en ella lanzaron sus carreras, llegando a duplicar sus ofertar luego del estreno de la película.