La reforma previsional ha sido uno de los proyectos más complejos del Gobierno del Presidente Gabriel Boric. Desde su llegada al cargo, el Mandatario ha intentado avanzar en modificar el sistema de AFP, aunque sin mucho éxito.
Ante este complejo panorama, y luego de la victoria del En contra en el plebiscito constitucional, el Ejecutivo decidió presentar una serie de indicaciones al proyecto de reforma previsional. Dentro de estas modificaciones, se destaca que, a diferencia de como se presentó inicialmente, ahora el 6% de cotización adicional no será exclusivamente para solidaridad, además de que, a petición de la oposición, el proyecto no contempla eliminar el DL 3.500, decreto donde se regula el sistema de AFP.
De esta forma, el proyecto propone que 2% de la cotización adicional vaya a las cuentas individuales de los trabajadores, aunque no en todos los casos esto será efectivo, ya que algunos recibirán más de lo que cotizaron y otros menos. Esto dependerá del cálculo del promedio de los cotizantes del Seguro Social. Por otro lado, el 4% restante se repartirá en un 3% a solidaridad y un 1% financiará la diferencias por las expectativas de vida de las mujeres y la sala cuna universal.
Las indicaciones presentadas por el Ejecutivo disponen que el aumento de los seis puntos en la cotización a cargo de los empleadores será de manera gradual, comenzando en el 2025, aumentando cada año un punto más.
De esta forma, la progresión será de la siguiente forma:
- 2025: 1 punto para solidaridad.
- 2026: 1 punto para solidaridad.
- 2027: 1 punto para solidaridad.
- 2028: 1 punto para ayudar a la cotización de las mujeres y sala cuna universal.
- 2029: 1 punto para la cotización individual.
- 2030: 1 punto para la cotización individual.
“Las AFP, tal como se conocen, dejarán de existir”
De aprobarse este proyecto, se crearán el Gestor del FIP, un órgano público y autónomo (como el Banco Central) que será el encargado de administrar el 4% de cotización a solidaridad. Este entregará licitaciones a entidades privadas para que inviertan los fondos de pensiones, asegurando su rentabilidad y sustentabilidad, además de aumentar en tamaño.
En este sentido, de acuerdo a Pulso, una minuta del Gobierno indica que“ las AFP, tal como se conocen y funcionan hoy, dejarán de existir en el sistema. Existirán Inversores Privados de Pensiones (IPP), los que ya no tendrán a su cargo las tareas de soporte. Así, los IPP solo gestionarán los ahorros (fondos) de los trabajadores, invirtiéndolos con el fin de hacerlos crecer. Esto permitirá la entrada de nuevos competidores privados, incluyendo a las cooperativas, aumentando la posibilidad de elección de las personas y reduciendo los costos para los usuarios por aumento de la competencia”
“El Estado creará una alternativa pública de inversión, el Inversor Público de Pensiones (IPE), que tomará la forma de una sociedad anónima, y que competirá en igualdad de condiciones con los privados (IPP) por la administración de fondos. Así, las y los trabajadores podrán elegir si desean que sus fondos sean administrados por inversores privados o bien por el inversor público, y dentro de los privados tendrá más opciones para elegir que las que existen actualmente”, se agrega en el documento.
Por otro lado, las AFP modificarán su forma de operar, ya que con el proyecto, se busca que las administradoras dejen el trabajo “operativo”, es decir, recaudar y obrar las cotizaciones, además de administrar las cuentas y atender a los clientes. Estas labores pasarán a manos de un nuevo ente privado, llamado Administrador Previsional Autónomo, el cual será licitado. Aunque estas entidades podrán seguir administrando los fondos de pensiones, al transformarse en Inversores Privados de Pensiones.