75 años de un conflicto: Israel vs Palestina una lucha permanente
Las tensiones entren ambos han existido desde antes de la fundación del estado en 1948.
Tras el ataque de Hamás en Israel, el conflicto entre los palestinos e israelitas vuelve a tomarse la agenda.
Las tensiones entre Israel y los palestinos han existido desde antes de la fundación del estado en 1948. Miles de personas de ambos lados han muerto y muchas más han resultado heridas en un conflicto que se ha gestado durante mucho tiempo.
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) dijeron que durante esa incursión se dispararon alrededor de 2.200 cohetes contra Israel. Hamas reportó la cifra en 5.000. Para poner esto en contexto, se dispararon unos 4.000 cohetes desde Gaza hacia Israel durante la guerra de 50 días en 2014.
El comandante militar de Hamas, Muhammad Al-Deif, llamó a la operación “Tormenta de Al-Aqsa” y dijo que el ataque a Israel fue una respuesta a los ataques a las mujeres, la profanación de la mezquita de al-Aqsa en Jerusalén y el actual asedio a Gaza.
Inicio del conflicto
En 1917, el gobierno británico entregó su apoyo al establecimiento de un estado judío permanente en Palestina con una carta llamada Declaración de Balfour, que reconocía el derecho de los judíos a reconstruir su antigua patria en Palestina. Esta declaración fue refrendada posteriormente por la Sociedad de Naciones (la predecesora de lo que hoy conocemos como la ONU).
Tras la desintegración del Imperio Otomano en la I Guerra Mundial, Reino Unido recibió un mandato de la Liga de Naciones para administrar el territorio de Palestina.
En 1922, el la Sociedad de Naciones autoriza a Gran Bretaña a ayudar al pueblo judío a establecer una patria en Palestina con el Mandato Británico para Palestina.
Sin embargo, la Declaración de Balfour no decía nada sobre la población árabe autóctona —excepto una referencia al respeto de los derechos civiles y religiosos— y, desde luego, no mencionaba ninguna aspiración nacional que pudieran tener los árabes.
Fundación de Israel
Tras la Segunda Guerra Mundial (1939-1945), en donde fueron asesinados más de seis millones en el Holocausto.
Después de la fundación de Israel el 14 de mayo de 1948, la tensión pasó de ser tema local a asunto regional. Al día siguiente de su creación las fuerzas de Egipto, Siria, Jordania, Iraq y Líbano invaden, dando lugar a la primera de una serie de guerras árabe-israelíes. Al año siguiente se alcanzó un armisticio y es cuando la Ribera Occidental se separa de Israel para convertirse en territorio jordano y Gaza se designa como territorio egipcio. El armisticio está destinado a ser un arreglo temporal, un preludio de los tratados de paz permanentes.
Para los palestinos, comenzó la Nakba, la llamada “destrucción” o “catástrofe”: el inicio de la tragedia nacional. 750.000 palestinos huyeron a países vecinos o fueron expulsados por tropas judías.
En 1967 ocurrió la Guerra de los Seis Días, que entre el 5 el 10 de junio tuvo consecuencias profundas y duraderas a distintos niveles. Fue una victoria aplastante de Israel frente a una coalición árabe, hecho en el que logró obtener la Franja de Gaza y la península del Sinaí a Egipto, Cisjordania (incluida Jerusalén Oriental) a Jordania y los Altos del Golán a Siria. Medio millón de palestinos huyeron.
El último conflicto árabe-israelí sería la guerra de Yom Kipur en 1973, que enfrentó a Egipto y Siria contra Israel y le permitió a El Cairo recuperar el Sinaí (entregado completamente por Israel en 1982), pero no Gaza.
Seis años después, Egipto se convierte en el primer país árabe en firmar la paz con Israel, un ejemplo solo seguido por Jordania.
Tras la retirada unilateral de Gaza, en el 2005, la Franja ha sufrido cinco guerras, incluida la actual. El gobierno de Benjamin Netanyahu, el más ultraconservador de la historia de Israel, ha acelerado la colonización de Cisjordania.
Las intifadas (rebeliones de palestinos de Cisjordania y la Franja de Gaza contra Israel, en 1987 y 2000, han servido de termómetros sociales para mostrar la indignación del lado palestino, que ha derivado en hechos violentos, y ha puesto la lupa sobre acciones militares israelíes.
Acuerdos frágiles y diferencias irreconciliables
En 1993, se produce el primer acuerdo de paz, conocido como los Acuerdos de Oslo. En estos se dan los primeros avances a décadas de enfrentamientos entre árabes y judíos: el punto más importante es el reconocimiento de la Autoridad Nacional Palestina. Una organización que representaría los intereses palestinos.
En los Acuerdos firmados en la capital noruega no se reconoció la integridad de Cisjordania como región palestina y fue dividida en tres zonas: Zona A, bajo control civil y militar de la Autoridad Nacional Palestina; Zona B, controlada por civiles y fuerzas militares israelíes y palestinas; y Zona C, bajo control civil y militar israelí (a menudo los palestinos se refieren a esta zona como “Cisjordanía ocupada”).
Sin embargo, la demora para el establecimiento de un Estado palestino independiente, la construcción de asentamientos de colonos judíos en Cisjordania y la barrera de seguridad en torno a ese territorio —condenada por la Corte Internacional de Justicia de La Haya— han complicado el avance de un proceso de paz.
Además, en las las últimas conversaciones de paz serias entre ambos grupos que tuvieron lugar en Camp David, Estados Unidos, en el año 2000, cuando un saliente Bill Clinton no logró un acuerdo entre Arafat y el entonces primer ministro israelí, Ehud Barak.
Las diferencias irreconciliables son las siguientes:
Jerusalén: Israel reclama soberanía sobre la ciudad (sagrada para judíos, musulmanes y cristianos) y asegura que es su capital tras tomar Jerusalén Oriental en 1967. Eso no es reconocido internacionalmente. Los palestinos quieren que Jerusalén Oriental sea su capital.
Fronteras y terreno: Los palestinos demandan que su futuro Estado se conforme de acuerdo a los límites previos al 4 de junio de 1967, antes del comienzo de la Guerra de los Seis Días, algo que Israel rechaza.
Asentamientos: Son viviendas, ilegales de acuerdo al derecho internacional, construidas por el gobierno israelí en los territorios ocupados por Israel tras la guerra de 1967. En Cisjordania y Jerusalén Oriental hay más de medio millón de colonos judíos.
Refugiados palestinos: Cuántos refugiados son depende de quién esté contando. La OLP dice que son 10,6 millones, de los cuales casi la mitad están registrados en la ONU. Los palestinos sostienen que los refugiados ( tienen el derecho de regreso a lo que hoy es Israel, pero para Israel abrir la puerta destruiría su identidad como Estado judío.
El reconocimiento de Palestina
La ONU reconoció a Palestina como “Estado observador no miembro” a fines de 2012 y dejó de ser una “entidad observadora”.
El cambio les permitió a los palestinos participar en los debates de la Asamblea General y mejorar las posibilidades de ser miembro de agencias de la ONU y otros organismos.
Pero el voto no creó al Estado palestino. Un año antes los palestinos lo intentaron pero no consiguieron apoyo suficiente en el Consejo de Seguridad.
Más del 70% de los miembros de la Asamblea General de ONU (138 de 193) reconoce a Palestina como Estado.