Embajadora de Chile en el Reino Unido renuncia ante cuestionamientos y niega “cualquier insinuación que sugiera conductas ilícitas”

Finalmente la embajadora de Chile en el Reino Unido, Susana Herrera, renunció en medio de múltiples cuestionamientos desde la oposición y el oficialismo. “La misión en Reino Unido seguirá funcionando con total normalidad, de acuerdo a las normas vigentes, y quedará temporalmente a cargo del Encargado de Negocios”, se informó desde el Gobierno

La polémica surgió luego de conocerse que Herrera realizó gestiones con la gobernación del Biobío con el fin de financiar un proyecto de mercado de maderas en Santa Juana llamado Living Lab Biobío por US$5 millones. Ante esto, la Secretaría General de Relaciones Exteriores (Segen), Gloria de la Fuente, solicitó un informe jurídico y le hizo ver a la diplomática de las irregularidades que esto podría implicar. Además, la convocó a una reunión para explicar la situación.

Es en este escenario en que Susana Herrera se defendió de los cuestionamientos en El Mercurio. “Con toda seguridad y firmeza digo que las acusaciones que están formulando en contra mía carecen de fundamento y son absolutamente falsas. Niego de manera contundente cualquier insinuación que sugiera conductas ilícitas o en detrimento de los intereses de nuestro país y del Ministerio de Relaciones Exteriores“, sostuvo.

Además, negó que dicho proyecto fuese con el objetivo de beneficiarse personalmente ni que se haya involucrado traspaso de fondos. “Siempre he manifestado una comunicación abierta y constante con las autoridades del ministerio, en línea con el compromiso por la transparencia en relación con las actividades que hacemos en la embajada”, dijo.

“Me hubiera gustado que los señores excancilleres y congresistas me hubiesen preguntado primero antes de emitir cualquier tipo de afirmaciones sobre mi persona“, agregó.

El Rey Carlos III y las fundaciones

En su defensa, Herrera insistió en que este proyecto estaba motivado por un interés del Rey Carlos III y que esto también se lo habría comunicado a la cancillería. “No fue pensado sólo en la Región del Biobío, sino que también en la Patagonia, en El Maule; el rey había tenido conversaciones con ellos, pero a partir de los incendios, de casi el 80% de la zona de Santa Juana, el asunto fue mutando de manera natural hacia allá, pero eso tampoco estaba definido, porque era parte del proceso hacer el estudio preliminar que tenía que llevarse a cabo y que requería decisiones de los actores“, insistió.

“Ni siquiera yo podía tomar decisiones de dónde se iba a desarrollar el proyecto. Obviamente, se apostaba a que después de los incendios fuera Santa Juana y así se lo comunicamos a la fundación del rey y a ellos les parecía que era consecuente, porque esto es parte de la regeneración de bosques. El proyecto pudo haber quedado en otro lugar (…) Yo solo podía conectar a las personas”, añadió Herrera.

Además, negó cualquier similitud con el caso Convenios, afirmando que “esto viene antes que pasara lo de las fundaciones” y que al darse a conocer dichas irregularidades decidieron detener el proyecto. “Cuando comenzó a cuestionarse lo de las fundaciones, lo paramos, porque esto estaba en investigación y era importante aclararlo”. “Preferimos esperar porque si había investigaciones, lo importante era que se aclarara para no involucrar al rey en un problema interno de Chile”, dijo.

Sobre su comunicación con cancillería frente a este tema, Herrera afirmó que “los detalles de este proyecto se iban trabajando con el equipo de la embajada. Si bien nos fuimos involucrando todos, fuimos súper cuidadosos en cómo esto se comunicaba, pero no lo sé“.