Nuevas aristas en caso convenios: Pago adelantado en Valparaíso y compra de lencería en Biobío
Las fundaciones ProCultura en Valparaíso y En Ti de Concepción se ven involucradas en una nueva arista de este caso.
Nuevamente salen a la luz una serie de irregularidades y polémicas transacciones de trato directo entre el Estado y fundaciones. Esta vez la organización sin fines de lucro ProCultura se ve nuevamente cuestionada en su financiamiento mediante asignaciones, mientras la ONG En Ti en Concepción habría destinado los recursos estatales para la compra de lencería.
Tras una solicitud vía Transparencia de Evolutivamedio y como publicó El Mercurio de Valparaíso la Seremi de Vivienda de dicha región habría realizado un pago adelantado del 50% del total del convenio a la fundación ProCultura en el marco de un plan de intervención de tres campamentos en Villa Alemana, sin embargo, dicho proyecto no había comenzado a implementarse al momento de ejecutar los traspasos de dinero.
En total, desde el organismo estatal se transfirieron $124.186.689 millones a dicha fundación. Con ese dinero debían diseñar loteros, obras de confianza, especialidades y expediente de expropiación de los campamentos Lomas de Bellavista, Manzana 33 y Las viñas Irene Frei, todas de Villa Alemana.
Por su parte, según publicó Emol, desde el Seremi del Ministerio de Vivienda declararon que “de acuerdo a la metodología y procedimiento de trabajo que estaba establecida con instrucciones privadas en el marco del Programa de Asentamientos Precarios en la región de Valparaíso, todos los convenios vigentes se han desarrollado mediante dos o más meses de pago, siendo la primera al inicio del convenio y la segunda o las consecutivas en la medida de reportar el avance, las rendiciones y su respectiva aprobación de los informes técnicos y financieros por parte del Serviu y la Seremi”.
Conflictos llegan a Concepción
La fundación En Ti en Concepción también se ha visto involucrada en irregularidades en la utilización de los dineros públicos. Según publicó Cooperativa, una OTEC la cual había sido contratada en planes de seguridad destino millones de pesos en lencería y ropa.
Los hechos se habrían revelado luego de la autodenuncia de Matías Godoy, quien es el representante legal de Frumisal, empresa que fue comprada por Nicolás Polanco, pareja de Camila Polizzi, excandidata a alcaldesa de Concepción y diputada.
Los antecedentes de estas irregularidades están en poder de la fiscalía, según informó el Gobierno Regional.