Alihuen Antileo Navarrete se convirtió en el único representante de los pueblos originarios en el Consejo Constitucional, alcanzando 159.410 votos, lo que equivale al 52,4% del total.
El representante del pueblo Mapuche ocupará el asiento 51 del organismo debido a que, para que los pueblos originarios obtuvieran un cupo en el consejo, la votación de sus candidatos debía ser igual o superior al 1,5% de la votación total a nivel nacional.
Según el Servel, estas elecciones hubo 1.318.212 personas inscritas para poder optar por la papeleta verde, es decir, votar por un candidato indígena.
¿Quién Es Alihuen Antileo?
El electo consejero mapuche es licenciado en ciencias jurídicas de la Universidad de la República y participó del primer proceso constitucional, no logrando resultar electo en aquella oportunidad donde hubo 17 cupos reservados: siete para representantes mapuches, dos para el pueblo aymara y uno por cada uno de los otros ocho pueblos originarios acreditados por la Corporación Nacional de Desarrollo Indígena (Conadi).
Además, el independiente actualmente es integrante de la agrupación Plataforma Política Mapuche en Santiago, donde ha ostentado los roles de vocero y presidente. También ha sido delegado mapuche ante la ONU y fue director del programa de pueblos originarios de la Universidad Arcis.
Su vinculación con la política parte en 1986, cuando fue exiliado a Suiza, integró las Juventudes Comunistas y formó parte del Frente Patriótico Manuel Rodríguez. Además de ello, también fue miembro fundador de la Coordinadora Arauco Malleco (CAM).
Entre sus propuestas para integrar el Consejo Constitucional destacaban sus tres ejes de campaña: el establecimiento de un “Estado social y democrático de derecho”, el reconocimiento de los pueblos indígenas y la protección del medio ambiente.
En conversación con La Tercera, Antileo explicó que la propuesta constitucional anterior que fracazó era “indigenista”, ya que a su juicio “pasamos de no tener en la Constitución en toda la historia de Chile la más mínima mención de pueblos indígenas, a tener en esta propuesta alrededor de 45 a 50 artículos. La ciudadanía lo percibió como una Constitución con un marcado acento y en cierta medida indigenista, y eso explica algo de la votación del Rechazo. Nosotros ahora pensamos que es necesario reducir el número de artículos, a los principales”.