La Comisión de Ética de la Cámara Baja decidió sancionar a la diputada Maite Orsini (RD) por incumplimiento de deberes parlamentarios, a quien se le aplicó la medida de “amonestación”, con una multa del 5% de su dieta.
Esto debido al llamado telefónico que le hizo a la jefa de la Dirección de Derechos Humanos de Carabineros, Karina Soza, ante un procedimiento que involucró al exfutbolista Jorge “Mago” Valdivia.
Tras revelarse este llamado, los diputados de laUDI, Jorge Alessandri, Juan Fuenzalida, Cristhian Moreira, Gustavo Benavente, Daniel Lilayu, Cristian Labbé y Joaquín Lavín presentaron un requerimiento en la comisión en contra la parlamentaria oficialista, acusando que había infringido “lo dispuesto en los números 1. y 3. del artículo 346 del Reglamento de la corporación, a raíz de un eventual tráfico de influencias”.
Según el requerimiento, se le imputaba a la legisladora “usar en beneficio propio, de parientes o de terceros, la información reservada o privilegiada a la que tuvieren acceso en razón de la función que desempeñan” y “usar indebidamente el título oficial, los distintivos o el prestigio de la corporación para asuntos de carácter personal o privado”.
La instancia disciplinaria estaba convocada para “iniciar las audiencias de prueba” y, tras escuchar a la parlamentaria frenteamplista, los integrantes de la comisión procedieron a resolver y acordar las sanciones por incumplimiento de deberes parlamentarios.
Según consignó La Tercera, la mayoría de ellos estuvieron por acoger el requerimiento contra Orsini, a quien se le aplicó la medida de “amonestación” con un multa del 5% de su dieta parlamentaria, es decir, un monto cercano a los $270 mil. Esto luego que no hubo acuerdo para aplicar la máxima sanción de “censura”.
La reacción de Maite Orsini
Tras revelarse la sanción, lo que hasta la noche del martes fue mantenido en silencio por el diputado del Partido Socialista (PS) y presidente de la Comisión de Ética, Nelson Venegas, a la espera de la redacción y notificación a Orsini; la diputada señaló a La Tercera: “No he sido notificada del fallo y me parece del todo improcedente que se filtre a la prensa antes de que yo pueda conocer su contenido, contraviniendo abiertamente lo que señala el reglamento de la Cámara sobre los procedimientos de la Comisión de Ética. No tengo la resolución y, si es así, vamos a estudiar el fallo y los recursos que correspondan”.
“Tengo la absoluta certeza de que no he cometido ninguna falta a la ética y resulta incomprensible que una comunicación entre autoridades sea entendida como tal. Estudiaremos el fallo y no descarto utilizar ninguna herramienta que me otorgue el Reglamento de la Corporación e, incluso, herramientas legales de ser necesario, para determinar mi absoluta inocencia en este tema”, sentenció.